Se acercan las elecciones generales 2019 y se lanzan al ruedo político ideas y fórmulas de gobierno ya conocidas, aunque también es posible que aparezcan nuevas figuras y nuevas propuestas nunca antes vistas. Es que la población de San Juan debe hacerse eco de cambios y satisfacciones para el desarrollo local y la promoción del trabajo. Es necesario que se adviertan nuevas y eficaces propuestas donde la naciente juventud tenga la posibilidad concreta de participar de los futuros gobiernos. Ya sabemos que San Juan no es ningún ejemplo de "alternancia en el poder” y menos aún cuando la Constitución prevé la reelección. Es que con el simple argumento de que "tenemos un proyecto” las figuras de cualquier gobierno tienden a conseguir un nuevo período como si éstos fueran los exclusivistas de las soluciones.

Las campañas deben caracterizarse por propuestas y no por ambiciones de poder. ¿Qué es una propuesta? Es o constituye un proyecto o idea que se presenta con una persona para que se lo acepte y se dé conformidad para realizarlo con el voto. Entonces ¿existen esas ideas? La pregunta es simple y resulta de las observaciones hechas. No se conocen tales y durante cada gobierno el pueblo recién se va enterando o se sorprende por una obra, una decisión política, un cambio de rumbo, etc. que no estaba en el programa inicial del postulante. Por otra parte ¿En qué consiste la ambición de poder? La ambición (Del latín ambito-nis) es el deseo ardiente de poseer riquezas, fama, poder u honores. Puede tratarse también como ambición, el deseo de obtener algo en grande, de tal manera que como seres humanos, podemos fijarnos metas ambiciosas, refiriéndonos con esto al hecho de querer lograr superar las expectativas, sobresalir del resto de las personas.

Un ejemplo de cierta política de reflexión parece ser propuesta por el legislador Miguel Ángel Pichetto quien había afirmado que "no se puede ser más el país idiota del continente” y últimamente expresó algo similar. Pichetto no avanza con sus ideas sino que menosprecia y menoscaba la idea de progreso en un frustrante estado de saberse que no es gobierno. Evidentemente este no es un ejemplo para Argentina como confirmando que somos ineptos. Es que la década ganada nos dejó esa herencia y en todo caso hay que salir de ella y evidentemente los esfuerzos ante la presión de los capitales, se están haciendo. Por lo tanto nadie es el "salvador o mesías” simplemente hay que trabajar y Argentina debe acostumbrase a que justamente hay que ponerle el hombro y la creatividad al esfuerzo laboral. En todo caso que Pichetto demuestre qué ha hecho o qué hace para que Argentina, en un concepto de progreso avance, si sus apreciaciones siempre son un obstáculo en el Senado de la Nación.

No se conoce desde la oposición ideas concretas y realizables de propuestas para la promoción de la industria y el desarrollo local y nacional que trasunten a posibles fórmulas de eficacia y eficiencia para el mercado. Se está a la espera para este 2019 que tanto oficialismo y oposición futuros formulen las mismas con fines promisorios y concretos.

 

Por Mario Daniel Correa D’Amico – Profesor, filósofo, pedagogo y escritor.