Hablar de Carlos Montbrun Ocampo, es hacer referencia a uno de los más importantes íconos de la música folclórica nacional y cuyana en particular. El pasado miércoles 26 de enero fue conmemorado el 115º aniversario del nacimiento de este destacado músico, compositor y cantante de los temas de Cuyo. Nació en San Juan (Albardón), en el seno de una antigua familia sanjuanina formada por su padre Luis Montbrun y su madre María Ocampo Vera Peñaloza, distinguida dama de origen riojano. Junto a Hilario Cuadros, Buenaventura Luna y otros, constituyeron la avanzada generacional más importante de la música de Cuyo en todo el país, y en Buenos Aires especialmente, en donde la cueca y la tonada tuvieron trascendencia nacional e internacional.

Fue su debut, formando el dúo Ocampo-Flores pues de este modo ambos interpretes muy jóvenes, ocultaban sus apellidos paternos, y así escapar al rechazo que la actividad podía generar en sus padres, quienes en principio se opusieron a que el joven fuera "cantor" lo cual aún hoy es recordado entre sus descendientes. Carlos Montbrun Ocampo, se radica en Buenos Aires en la década del "30 y desde entonces fue el organizador de la peña "Mi Refugio" además de ser el artista que actuaba con más frecuencia. Es a partir de 1930 en que la música y las danzas del interior del país comenzaban a ser aceptadas por los porteños. Así lo encontramos tocando en las Fiestas Patrias de mayo de 1954, en la sede del Jockey Club, además este gran autor fue el único músico del folclore, que participó en la fiesta de recepción con que se homenajeo al Príncipe de Gales (Eduardo VIII) en su visita a la Argentina.

Cultivó amistad con el genial Walt Disney, cuando estuvo en nuestro país, su calidad y señorío le permitieron trabar amistad con hombres y mujeres que hicieron historia. No es desconocida sus simpatías políticas, por el peronismo, en especial con Eva Duarte de Perón, quien lo distinguió con su amistad.

Son famosas sus composiciones las cuales han sido tocadas y cantadas por infinidad de artistas nacionales y extranjeros, entre otras "Las dos Puntas", "Entre San Juan y Mendoza", "En Ullum están chayando" y "El buen remedio". Además actúa en Radio Splendid, con las "Alegres fiestas gauchas", integrando a su conjunto al artista indio Quintín Araya (por Irala) cantor, zapateador y guitarrista.

Aunque con frecuencia actuaba con ropa de gaucho, preferentemente, lo hacía vestido de smoking. Según los cultores del folclore y quienes fueron sus amigos, Montbrun Ocampo "fue quien vistió de gala al folclore". Además éste, incluyó piano, arpa, violín, instrumentos connotados de "dignidad" lo que convertía en clima festivo y más popular a su música.

A mediados del "50, se radica en Mendoza con su familia, vuelve en repetidas veces a San Juan, para saludar como gustaba decir, a su hermano Luisito (mi abuelo), a sus entrañables amigos, y además para actuar en la provincia que lo vio nacer. Recuerdo a un admirador de Montbrun Ocampo, quien me contó, que siendo niño y alumno en la escuela primaria "nunca" había escuchado tocar el Himno Nacional Argentino al piano tan "maravillosamente" como nuestro comprovinciano, que aún después de muchos años se le "ponía la piel crespita" cuando lo recordaba. Muere en Mendoza (Godoy Cruz) el 4 de junio de 1962, pobre de recursos económicos, pero rodeado de el cariño y muestras de congoja del pueblo de la provincia que lo adoptó en sus últimos años.

Su "querido San Juan" como siempre lo recordó, está en deuda moral, con este gran cultor de los temas nuestros, que le supo dar trascendencia y alegría al folclore de nuestra patria chica.