Últimamente han aparecido problemas en la ciencia argentina que no son creíbles en ningún país del mundo civilizado. En la Argentina estudiamos gratis en las universidades y la carrera que queramos sin ninguna injerencia del Estado, salvo que esos estudios son pagados con fondos públicos, es decir por todos los argentinos. Eso está bien.

La enseñanza gratuita universitaria permite a la sociedad mejorar aunque el alumno abandone a los dos años de estar en la universidad, porque como decía Mitterand será un ciudadano diferente al que nunca pisó una universidad.
Los doctores que por año se reciben, alrededor de 1.000, lo hacen en cualquier área temática sin que el Estado nacional fije necesidad temática alguna.

Parece una creencia actual que todos esos doctores los debe absorber el Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) como única fuente de trabajo en la carrera del Investigador y en este caso también sin importar las necesidades que pueda tener la Argentina. Las empresas privadas y los otros organismos del Estado incluyendo las universidades no cuentan como fuente laboral. No se dan por enterados del problema.

O sea, vivimos en el único país del mundo donde estudiamos gratis lo que queramos y luego una entidad del Estado nacional, Conicet, debe absorber a todos en cualquier temática para investigar lo que quieran sin que se establezcan pautas de ingreso o temáticas de acuerdo con las necesidades del país ni tampoco prioridades geográficas y seguimos concentrando a todos en el área metropolitana, La Plata, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.

Como evaluador de Conicet me han tocado temas cuya importancia no discuto pero que no son de interés para la Argentina: las relaciones entre países de América Central, la guerra franco alemana de 1870-71, entre otros de similar categoría.
¿Por qué no fijamos cupos con particular énfasis en las zonas no pobladas científicamente de la Argentina? ¿No se dan cuenta que si la Argentina no produce ingenieros, matemáticos, físicos, expertos en soft y lo que en USA se denomina STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) la Argentina no progresará nunca? Esas temáticas sí deberían ser patrocinadas por el Estado nacional facilitando accesos cupos y estudios.

En ciencias sociales también hay temas estratégicos para la Argentina como los ligados a la educación. En otras temáticas no prioritarias, el estudiante o el doctorando debería saber que puede dedicarse a ellas pero debe haber cupos regionales y deben trabajar en lugares distintos a Capital Federal y alrededores donde tenemos, por ejemplo, el grueso de trabajadores en ciencias sociales. Los investigadores en ciencias exactas y de la Tierra están mejor repartidos porque los observatorios y centros de física están en lugares adecuados climáticamente y porque, por ejemplo, la sismología requiere regiones sísmicas.

El Conicet no puede crecer al azar de acuerdo con la temática que elijan sus becarios e investigadores. En cualquier país del mundo hay dos políticas bien distintivas: o se pagan los estudios universitarios y el estudiante elige lo que quiera o todo es gratis pero el Estado dice dónde estudiar, qué estudiar y dónde trabajar. Lo de la Argentina es único en el mundo y lo que está ocurriendo hoy en la ciencia argentina es insólito por donde se lo mire.
(*) Astrónomo.