Al inicio de la semana, distintos analistas nacionales opinan sobre el futuro de la economía de Argentina en medio de tensiones en la coalición del presidente Alberto Fernández y una alta inflación que golpea la economía. El país, que cerró recientemente un acuerdo con el FMI por unos 44.0000 millones de dólares, transita una moderada recuperación de sus cuentas tras años de recesión y crisis financiera, agravadas por la pandemia de coronavirus. En el plano global, la guerra en Ucrania agudiza las presiones inflacionarias y el endurecimiento de las tasas de interés mundial, que golpea a las economías emergentes.
- Desconfianza. "Un cristal de credibilidad pareció quebrarse en la confianza hacia el sufrido mercado local. El recrudecimiento de la inflación y los vaivenes políticos parecieron atentar contra la esperanza de las autoridades económicas de mantener tasas, devaluación e inflación en un entorno inferior al 4% mensual y con tendencia declinante. Ello se notó en el súbito despertar de los dólares libres, que crecieron más del 6% semanal", comentó VetNet Research.
- Riesgo. "El frente externo luce definitivamente más desafiante que algunos meses atrás. Las consecuencias de la guerra en Ucrania no se perciben tan transitorias como en un principio. La desaceleración económica global presenta un riesgo para la región y para la Argentina en particular, atenuando el impacto favorable de la suba en los precios de nuestras exportaciones", dijo Ecolatina.
- Preocupante. "Se festeja si la inflación de abril está décimas debajo de 6%. Ya vemos lo preocupante que puede ser. Es un escenario muy preocupante porque el Gobierno aspiraría en abril a decir por lo menos que bajó de vuelta al 4,5%, que es malísimo igual", dijo en declaraciones radiales Fabio Rodríguez, de M&R Asociados. "El acuerdo con el Fondo intrínsecamente no tuvo un componente antiinflacionario. Se subestimó ese componente y ahora estamos todos hablando de eso”, agregó.
- Datos. "Los datos (…) muestran una coyuntura caracterizada por un nivel de actividad cercano a los máximos recientes, un ritmo inflacionario por encima del 60% y una escasez de dólares derivada de la demanda de divisas para importaciones, servicios y otros pagos que no permite acumular reservas de modo contundente aún con los altos precios internacionales", afirmó Delphos Investment. "En este esquema es necesario un plan de estabilización que permita crecer sin sacrificar el nivel de actividad. Sin embargo, su implementación requiere de un liderazgo político mucho mayor al que muestra la coalición gobernante", estimó.
- Actividad. Un informe del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina mostró que la actividad en febrero registró una suba mensual de 5,4% e interanual de 10,8%. De los doce sectores que componen el IPI CEU, diez registraron subas interanuales.
- Recuperación. "Hasta hace poco los inversores preferían focalizarse en el post 2023, y así ensayaron una recuperación en los ADRs y bonos apostando a un clima más amigable que mejore las expectativas tras las claves elecciones presidenciales. Sin embargo, la profundización de la cautela y volatilidad desde el frente externo está influyendo negativamente en el apetito por riesgo global, y así es que crecen los rebalanceos hacia posicionamientos defensivos", dijo el economista Gustavo Ber.
Por Walter Bianchi y Nicolás Misculin
Agencia Reuters
