Año 1900. Dos familias polacas llegadas para una colonia de Misiones, cuyos trajes ponían una nota diferente en el viejo Hotel de Inmigrantes.

Por Leopoldo Mazuelos Corts
DNI 5.543.908

A fines del siglo XIX y principios del XX, aumentó la influencia de inmigrantes europeos y asiáticos en la República Argentina. Se calcula que fueron alrededor de 5 millones de personas que llegaron para establecerse en el país. Esto, en gran medida a lo que dice la Constitución Nacional, que invita a ..."todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino...''. Esos inmigrantes escaparon de guerras, falta de trabajo, con ansias de libertad. Llegaron a la Argentina, un país que estaba lleno de posibilidades de progreso, donde el desarraigo para esas familias se hacía menos traumático. Estos nuevos habitantes que cubrieron toda la geografía del país y cansados de las dictaduras y guerras europeas, trajeron también junto a sus valijas o pertrechos de grandes baúles, sus culturas, sobre todo las ganas de trabajar. Argentina, muy organizada, los recibió hasta hacerlos sentir parte de este país, cuya generosidad fue brindada por el criollo, que les compartió. Lo nuevo, lo distinto no tardó en hacer nuevos tejidos sociales haciendo cada día un país más grande, con más posibilidades y oportunidades enriqueciendo hasta la cultura argentina.


Es hacer notar que en San Juan, la mayoría de la inmigración fue española; en Mendoza fue italiana; en La Rioja, españoles y árabes; en Santa Fe como en las provincias mesopotámicas, fueron muchos italianos, polacos, alemanes, del centro europeo. Mientras que Buenos Aires fue donde confluyeron cientos de miles de personas de diversos países asiáticos como por ejemplo Japón como de varios países de Europa.


Sin embargo, en la actualidad, quienes llegan a nuestro país, ya no son europeos que querían trabajar y hacer un nuevo hogar en nuestro país. Ahora son en su mayoría latinoamericanos. Muchos de ellos (no todos), están lejos de ser de ese tipo de antiguos inmigrantes. Sólo son escapados o empujados por la pobreza que los distintos gobiernos los someten, buscando todo gratis en la Argentina, como salud educación y hasta subsidios como planes sociales. No obstante nuestro país sigue siendo generoso. Dentro de esta invasión de latinoamericanos están los que usan la oportunidad para, una vez en el país, hacer retroceder a la sociedad argentina, introduciendo desde la droga hasta nuevas modalidades de cometer delitos. De esta manera se empobrece nuestra cultura. "Inmigrantes'' siglo XXI, estos nuevos habitantes de la República Argentina, no traen su cultura, sino más bien tienen el objetivo de hacer dinero al corromper a la juventud, en la cual la droga es su bandera y/o propósito. A diferencia de aquellos que llegaron a fines del siglo XIX y principios del XX, estos "nuevos inmigrantes'', no todos, se han concentrado en asentamientos marginales, des culturizando al argentino, no respetando sus leyes. Mucho tienen que ver los gobernantes, que para sacar sus réditos políticos, hacen la vista esquiva de una realidad que cada día es más peligrosa y dañina. Faltan leyes para frenar este avance de extranjeros y faltan decisiones gubernamentales para expulsar lo que no sirve, lo que no tendría que estar o entrar al país que de a poco va perdiendo valores, por nuestra culpa, pero también, muchas veces por culpa de terceros.