De izquierda a derecha Carlos Quinteros, Guido Iribarren (ambos fallecidos), David Temiño y Elida Margarita Araya, en el banco de la Plaza 25 de Mayo donde nació Ediciones Cielo Raso. 

Si de coincidencias hablamos, recordaremos que en agosto de 1938 transcurrían los primeros años de vida del Museo de Bellas Artes, institución cultural de la provincia que iniciaba su derrotero hasta convertirse en la actualidad en el Museo Provincial de Bellas Artes Benjamín Franklin Rawson (MPBAFR). Ese mismo mes y año nacía en nuestra provincia una de las personas que más contribuiría con esa entidad, Carlos H. Quinteros, periodista, escritor y poeta, quien desde 1988 hasta su muerte en 2022 dedicó su tiempo y afanes a hacer que el museo adquiera el prestigio que actualmente ostenta.

Si bien fue la primera Comisión Provincial del museo la que organizó la primera exposición en homenaje al pintor sanjuanino Franklin Rawson, reuniendo sus obras dispersas, varias fueron las entidades y personas que de una u otra forma colaboraron para hacer realidad el edificio propio de Avenida Libertador, frente al Parque de Mayo.

Carlos Quinteros, desde la presidencia de la Asociación Amigos del Museo, luego Asociación Benefactora y con su última denominación de Museo Provincial de Bellas Artes Franklin Rawson, cumplió un meritorio papel superando numerosos escollos hasta llegar a este presente venturoso que ofrece el museo más importante de San Juan.

Pero el MPBAFR no es la única gran obra en la que Quinteros intervino, sin duda fue Ediciones Cielo Raso, creada con un grupo de amigos amantes de las letras y las artes en 1963, la que lo encauzó en su vocación de escritor, periodista, poeta y fotógrafo. Dentro de esta actividad obtuvo premios a nivel nacional en narrativa y fotografía. Integró el panel de escritores en la Feria Internacional del Libro y en 1993 fue designado secretario general de SADE-San Juan, cargo que ocupó hasta 1995.

La profesora Elida Margarita Araya, actual presidente de la Asociación Benefactora del Museo Benjamín Franklin Rawson, señala que la obra de Carlos Quinteros "no es posible inscribirla en un romanticismo estricto y atemporal. Su poemario descubre una vena sustancial de emociones no desbordadas que abrazan al humano en las humildes labores, la comprensión de sus decepciones y la confianza en días mejores signada por la palabra mañana…". Acerca de Ediciones Cielo Raso, Araya recuerda que "una noche de 1963, en la Plaza 25 de Mayo, con la compañía de un cielo estrellado Guido Iribarren y Carlos H. Quinteros le pusieron nombre a los sueños y así nació ‘Cielo Raso’ (de estrellas), una entidad literaria llamada a perdurar en el tiempo. Por entonces, tenían mucho para decir y junto a Hilda Urbieta y David Temiño lanzaron su primer libro en 1967. Toda la maestría de Quinteros se puede observar en su extensa trayectoria como escritor, en su obra particular y la que dejara a través de numerosos trabajos publicados en su querido DIARIO DE CUYO. Notas en las que no dejaba de mencionar a escritores y poetas de la talla de Antonio de la Torre, Buenaventura Luna, Lizzie Gallo, Jorge Leónidas Escudero y Rogelio Díaz Costa, entre otros.

En diciembre del año pasado, la Asociación Benefactora del Museo de Bellas Artes Franklin Rawson organizó un último homenaje a su expresidente Carlos Quinteros. En la ocasión circuló un sobre con el título "Cartas a Cielo Raso: envío de Carlos Quinteros, Guido Irribarren, David Temiño, Elida Margarita Araya y Paolo Muñoz".

 

Por Alfredo Correa
DIARIO DE CUYO