La convocatoria en el sitio Facebook de Internet, por parte de alumnos mendocinos, para no asistir a la escuela y concentrarse en lugares públicos, se ha convertido en una discusión nacional. Con nombres distintos -"rateada", "yuteada", "cuqueada" o "chupina"- la invitación tiene coordenadas precisas de hora y lugar en cada provincia.
El tema es serio, al punto tal que ha llegado hasta el Ministerio de Educación de la Nación. Su titular, Alberto Sileoni, declaró que el Consejo Federal de Educación, del que participan los ministros del área de todas las provincias, debatirá el próximo martes qué posición debería adoptarse ante estos hechos. El fenómeno muestra la cuestión de la disciplina y los modelos para establecerla.
Si los adolescentes desean unirse y realizar tareas solidarias, es algo positivo, pero no tendrían que estar unidos a una invitación generalizada a faltar a clase, ya que con una pretendida actitud de bien no se debe legalizar algo que objetivamente está mal. Habrá que educar, enseñando a adolescentes y jóvenes, la importancia de ejercer responsablemente la libertad. No se trata simplemente de reprimir, sino de aceptar el desafío que presenta esta problemática para dialogar, planteando una reflexión que permita a educadores, padres e hijos comprender la seriedad de la cuestión.
Los padres y quienes integran la escuela deberían buscar, a través de una serena reflexión, puntos de encuentro con el fin de ayudar a que los estudiantes comprendan que su misión es estudiar, sin invitar masivamente a dejar de cumplir con aquello que en esta etapa es su deber. Niños, adolescentes y jóvenes no necesitan padres o educadores cómplices de sus planteos, sino guías que sin ser autoritarios pero sí con autoridad, les permitan, en un clima de libertad y responsabilidad, afianzar el valor de la formación.
Una madre dejó su mensaje en la página de la "rateada" nacional afirmando que al principio le pareció una picardía, pero que luego, al enterarse que iban a realizar una tarea solidaria, felicitaba a sus tres hijos y los apoyaba para que faltaran a clase. Otro padre, con una posición diametralmente opuesta, aunque no por eso menos cierta, escribió: "Chicos, menos face y más book". La convocatoria a estas "rateadas" en cadena sirve para dejar en evidencia las carencias pedagógicas y de contención de la escuela argentina. Ésta debe contener pero también atraer.
La educación es una tarea que tiene como fundamento la atracción, no la simple oposición, evitando caer en el facilismo que es lo contrario a la disciplina.