La diversificación productiva anunciada por una cooperativa lechera ubicada en el departamento Caucete, que nuclea a doce tambos sanjuaninos, es un ejemplo de evolución empresaria con el propósito de ampliar su oferta de procesamiento en un área comercial muy competitiva donde juegan poderosas industrias lácteas, incluso multinacionales, arraigadas en el mercado argentino.
No obstante este desafío, el proyecto de la firma caucetera para iniciar la elaboración de leche saborizada y envasada en sachet es auspicioso, tanto porque amplía sus productos como porque los endulzará con mosto rectificado, también de origen local, además un yogur probiótico de alta demanda, según el informe que recibió esta semana el ministro de Desarrollo Humano, Walberto Allende, al visitar las instalaciones del emprendimiento.
La cooperativa láctea tiene la ventaja de ser proveedora del Gobierno de San Juan de las 26.000 copas de leche para los comedores infantiles, lo que permitirá avanzar con las variantes saborizadas de frutilla, vainilla y chocolate y endulzadas en origen. Es decir, está asegurada la colocación de estos productos y con una hábil estrategia empresaria pueden incorporarse al mercado con mejor precio y calidad, gracias a condiciones favorables.

La comercialización de la producción láctea de los doce tambos ubicados en Caucete, Chimbas, Pocito, San Martín, Albardón, Angaco y Santa Lucía asegura la materia prima, de la misma manera que el mosto proveniente de la vitivinicultura local. Lo importante es ampliar la capacidad para atender la demanda potencial, más allá de la cobertura escolar, y garantizar la calidad respetando rigurosamente los controles sanitarios.