Así ocurrió ayer, cuando en el patio de la Casa de Sarmiento se habilitó un telescopio para la observación astronómica. Algunos, se emocionaron hasta las lágrimas.
Así ocurrió ayer, cuando en el patio de la Casa de Sarmiento se habilitó un telescopio para la observación astronómica. Algunos, se emocionaron hasta las lágrimas.