Los diseños curriculares tienen diferentes definiciones pero comenzaré por el origen de la palabra .El término ‘curriculum” (en educación) es el concepto bajo el cual se desarrollan los programas o planes de estudios en una institución educativa. El objetivo es estructurar, fundamentar, determinar y proyectar los contenidos objetivos, técnicas y metodologías a instrumentar en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Así también, la manera que serán evaluados. Todo ello, dentro del marco de la filosofía pedagógica adoptada. Ello, implica también, lo relativo al proceso educativo y responde a preguntas tales cómo, cuándo y por qué evaluar. En consecuencia, se dice que funciona como una herramienta de regulación pedagógica. Además está estrechamente ligado al contexto cultural, social y político. Así aclarado el concepto, cabe recordar que en San Juan se sancionó la Ley Provincial de Educación número 1.327 sancionada el 16 de julio de 2015. Esta fue consensuada con todos los sectores de la comunidad que la enriquecieron con sus aportes. En ella se establece entre otros artículos ‘mecanismos de renovación periódica de los contenidos curriculares que coincidan con los paradigmas en ciencia, tecnología didáctica, pedagogía entre otros. Asimismo, determina una política de evaluación concebida como instrumento para mejorar la calidad educativa, evaluación periódica y continua (artic 180).”
Hace pocos días se dieron a conocer los ‘diseños curriculares de Nivel Primario” enmarcado dentro de la Ley Provincial que está promulgada pero no reglamentada. Allí los contenidos están basados en los NAP( Núcleos de aprendizajes prioritarios) es decir, los contenidos básicos. Y sólo citaré algunas áreas como transversales Educación Sexual Integral; Educación Ambiental, y Prevención Sísmica. Y un contenido muy importante como es la articulación de niveles y ciclos. No se incluye un contenido prioritario como es Educación Emocional, que la ley provincial sí la establece. Es importante destacar que ya se aplicaba la ‘Unidad Pedagógica” en primero y segundo grado, como formas de favorecer las trayectorias escolares. Siempre se habla de la importancia que tiene el perfeccionamiento, actualización y capacitación docente, la que debe ser permanente y en servicio. En este caso, hubo una jornada destinada a los supervisores a través de una especialista. Una segunda jornada, dictada por una Supervisora del Equipo de Supervisores y ellos perfeccionarán a los docentes en cada zona. En este caso, se cometieron algunas omisiones. El diseño curricular no fue consultado a Supervisores, agentes de cambio y motores del proceso. El perfeccionamiento fue escaso, el diseño curricular debió ser analizado por cada uno de los especialistas que los elaboró en las diferentes áreas. Además, este diseño debe bajarse a través de internet, no pensando en los costos que significa a los docentes para imprimir 1.027 hojas de los dos tomos. En el mejor de los casos, debe reunir dinero la escuela, que no tiene caja chica, sale del bolsillo del docente y debería proveerlo el Estado. Hago la salvedad que en muchas zonas no tienen conectividad y aún habiéndola, no siempre es ágil y efectiva la conexión. También pensemos que cuando el Ejecutivo reglamente la Ley Provincial, es decir le da validez y límites a los contenidos de los respectivos articulados, tal vez deban hacerse nuevos cambios y estas marchas y contramarchas dañan el proceso educativo. En la era digital que estamos viviendo tampoco habrían adelantos porque son muy escasas las escuelas que poseen laboratorios de computación o computadoras disponibles. Es necesario una mayor inversión en esta área. Si reflexionamos juntos, sabemos que la computadora es una herramienta pedagógica, no es todo, podríamos permitir el uso del celular en clase que a ningún chico hoy le falta y con los límites necesarios para su uso. Ellos allí, tienen el mejor poder de síntesis en los mensajes de textos y luego lo pueden trasladar al soporte de papel con las aclaraciones del docente y su creatividad para sus múltiples usos. Se ha dado un paso importante en la elaboración de los diseños curriculares, pero no en su instrumentación y la evaluación clara y precisa de esos contenidos. Deseamos que se efectivice el perfeccionamiento en servicio, para la eficaz aplicación de los contenidos del diseño curricular.