La influencia cautivante de los medios de comunicación sobre niños y jóvenes, ha llevado a los educadores a veces a reflexionar acerca del modo en que estos medios interactúan sobre las nuevas generaciones. Podríamos señalar dos aportes, uno pedagógico y otro didáctico, que se ocupa de cómo la enseñanza sobre los medios se integran en las diferentes situaciones formales de la educación, otra crítica, la que se encarga de proponer el pensamiento libre y crítico ante mensajes mediáticos y se suele denominar lectura crítica. 


Los medios de comunicación son recursos e instrumentos que han de encuadrarse dentro de un marco social y contexto educativo particular que recoja modelos de intervención específicos para el aula. Hay que distinguir entre "educar con los medios'' (con ellos como instrumentos de aprendizaje) y educar en los medios (acerca de los mismos medios y de sus modos de significar). La educación en medios de comunicación, aparece en el sistema educativo como contenido transversal (en todas las áreas). Ellos son el ambiente que nos rodea y como sostiene el Dr Pedro Barcia, "El profesional de la docencia ha de estar extra ambientado para poder guiar a las nuevas generaciones en una tarea que, no por dificultosa, deja de ser apasionante: pensar la realidad mediática críticamente''. El diálogo entre escuela y los medios, es desde luego posible. Los medios son parte esencial de los procesos de comunicación en las sociedades modernas y especialmente el proceso de socialización. En esta era tecnológica, las personas son más dependientes de los medios. Hay nuevas formas de periodismo, y también de aprender. Las tecnologías vinieron a realizar un cambio radical en la vida moderna. Alumnos hipercomunicados. No menos importante, es pensar que hoy existen otros dispositivos que usa la audiencia en los medios radiales y televisivos. Eligen ver titulares como .com noticias, otros portales, youtube y las más preferidas, las redes sociales. Ante ese abanico de elecciones hay multiplicidad de miradas educativas.

No es posible analizar la relación de niños y jóvenes con la escuela y el saber, sin considerar el lugar que ocupan los medios (especialmente la televisión) en su vida cotidiana.

Buscar el lugar que pueden obtener los medios a través de una formación que los analice como objeto de estudio y conocimiento es, en efecto, necesario. La escuela no concentra la suma de conocimientos que recibe hoy el alumno. Es preciso articular los campos de la educación y la comunicación a fin de cruzarlos y de construir nuevos paradigmas que integran el aporte de ambas disciplinas. Las investigaciones en educación y en comunicación deben articularse a fin de elaborar estrategias específicas comunes. Dicho de otra manera, consiste en aprender a analizar la forma en que los medios construyen el mundo y se presentan como mediadores entre el universo y nosotros. Ellos participan de la construcción de nuestra identidad.


La escuela debe formar alumnos donde se potencie el juicio crítico, la reflexión, el aprender a aprender. Es la manera cómo damos sentido al mundo. Supone analizar el lugar del "otro" para poder situar "nuestro" propio lugar. Una educación en medios invita a revalorizar la cultura de los propios alumnos, formando su identidad nacional. Más allá de la diversidad lo que identifica a los alumnos, es su derecho a aprender en la escuela y, ciertamente, utilizando competencias digitales.