Con motivo de entrar en vigor el Tratado de Lisboa, que modifica el Tratado Constitutivo de la Comunidad Europea y el Tratado de la Unión Europea (UE), nuestro país presentó notas rechazando la pretensión de asociar territorios argentinos al bloque europeo.
En ese sentido se instruyó a nuestra embajada ante la Unión Europea y a las acreditaciones ante los 27 estados miembros, para rechazar la inadmisible pretensión británica que involucra a la UE. Se hizo expresa reserva de los derechos argentinos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, ya que esos territorios y los espacios marítimos circundantes integran el territorio de la República Argentina y están ilegítimamente ocupados por Gran Bretaña.
Es un absurdo incluir en el bloque europeo a un "Territorio Antártico Británico", que Argentina no reconoce por una cuestión lógica: tanto nuestro país como el Reino Unido son partes del sector antártico, según el Artículo IV del Tratado Antártico, vigente y firmado por Londres. También la UE debe tener en cuenta que los territorios argentinos están en una situación especial, que difiere al de los otros países con territorios de ultramar.
El futuro isleño austral está indisolublemente vinculado con la solución de la disputa de soberanía entre la Argentina y el Reino Unido, tal como documentan numerosas resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, a partir 1965. Esto fue reiteradamente planteado por Argentina a lo largo de todo el proceso de negociación, aprobación y firma del Tratado de Lisboa.