En su visita del miércoles último a Mendoza, la presidenta de la Nación hizo un anuncio auspicioso para San Juan: la ampliación de la provisión de gas natural, que permitirá alimentar a la segunda planta cementera que se levanta en nuestra provincia. Se trata nada menos que de la esperada posibilidad de contar con energía suficiente para encarar proyectos fabriles de gran proyección, caso de la nueva fábrica de cemento de la firma Loma Negra, clave para atender el crecimiento de la construcción, una de las variables más sensibles de la economía.

Según lo manifestado por Cristina Fernández de Kirchner, con las nuevas instalaciones de compresión de gas, ubicadas en la vecina provincia, se duplicará el actual suministro de gas a San Juan lo que supone cubrir las necesidades no sólo de la inversión que realiza la empresa brasileña Carmargo Correa sino de otros sectores industriales con serias restricciones energéticas. Por ejemplo, los cortes de gas de temporada que afecta a los hornos de cal, debiendo recurrir a otros combustibles más caros y de compleja logística lo cual resiente la competitividad de las caleras.

La trascendencia del anuncio es parte de una serie de obras de infraestructura energética que se complementan, como la puesta en marcha en Neuquén de una nueva batería de crudo no convencional con capacidad para el tratamiento, compresión y transporte diario de más de 1000 metros cúbicos de petróleo y 250.000 m3. de gas, provenientes de parte de los 50 pozos shale de la zona.

Y, sin duda, lo más significativo de la visita presidencial a Mendoza, ha constituido la inauguración de la ampliación de la destilería de YPF, ubicada en Luján de Cuyo, donde se procesa el 35% de los combustibles líquidos del país, con una inversión de más de 2600 millones de pesos. El objetivo de la modernización es mejorar la calidad de las naftas y del gasoil para adecuarlos a las nuevas y más estrictas exigencias ambientales, es decir un combustible más limpio y de mejor calidad, que reducirá las emisiones generadas por los vehículos y otorgará mayor vida útil a los motores.

La modernización y adecuación de la destilería mendocina comenzó en 2011 y el programa se adecuó el año pasado a los nuevos lineamientos de la petrolera estatal, como parte de establecer estándares internacionales en el competitivo sector energético.