Tristemente le dijimos adiós a Maximiliano Chuk el día de su fallecimiento, persona siempre dispuesta a despejar dudas, verdadero maestro en su área de saber y con quien compartimos largas conversaciones sobre la medicina en San Juan, especialmente en el siglo XIX, tan azotado por epidemias y donde médicos que fueron fundantes en tantas cosas, realizaron una tarea titánica.
También supimos de su amargura cuando las historias clínicas que habían venido de la OMS, en época del Dr. Valois Martínez Columbres, modelos en el país y que hoy harían tanta falta, por la información que arrojaban, fueron destruidas por la ignorancia. Cosa no rara en San Juan.
Con Maximiliano analizábamos algunas estadísticas médicas, dadas en el ámbito sanjuanino, pertenecientes a la segunda mitad del siglo XIX. Como elaboración numérica no difiere de las metodologías generales que se aplicaban en esa época, pero si presentan un toque personal que le incorporaba el médico autor de las mismas.
"Por supuesto cada médico imponía su propio criterio al presentar los números y ya se tornaba bastante complejo, comparar cuadros estadísticos de médicos distintos que trabajaban sobre un mismo tema. Esa situación mejoró bastante a comienzos del siglo XX, cuando se empiezan aplicar las normas desde la Dirección General de Higiene, que fundamentalmente trataban de rescatar información sobre los nacidos, fallecidos y vacunados.
En un principio, el método médico consistía en contabilizar los casos de morbi-mortalidad, haciendo un recuento de los casos similares. O sea, cada "caso", correspondía a un individuo determinado, que presentaba signos similares a otros "casos", observados por el médico tratante o por el grupo de médicos que operaba en el Hospital, generalmente de números reducidos.
A veces, la información se consignaba por sexo, raza, nacionalidad y con menor frecuencia por edad (este tema estaba afectado porque los registros de fecha de nacimiento comúnmente eran imprecisos).
No formaba parte del criterio médico en el siglo XIX, el conjunto de variables estructuradas que rige en la actualidad, incluso a nivel mundial por presencia de la OMS. Lo cierto es que cada paciente, en el área hospitalaria, constituía un "caso", que casi se aproximaba al contexto de una sentencia, entendiéndola como una palabra santa.
También recordaremos que cuando un paciente accedía a un Hospital, su problema estaba muy avanzado; prácticamente no existía una medicina preventiva de control de salud para la población. Por esta razón los médicos de aquella época ejercían su profesión en condiciones muy aleatorias; y normalmente, cuando emitían su diagnóstico, prácticamente lo hacían como palabra final.
Estos aspectos se manifiestan en algunos escritos médicos de aquellas épocas, cuando muestran su impotencia por la magnitud alcanzada por epidemias, los déficit alimenticios (miseria orgánica), las enfermedades venéreas y la tuberculosis. Se deduce entonces la relatividad de las "Estadísticas del siglo XIX", cuando la magnitud de los problemas ocasionados por las enfermedades y la carencia de los medios para enfrentarlas, sumían a la profesión médica en un atolladero de soluciones imposibles.
Debemos comprender la dimensión de la angustia que embargaba a los médicos de aquella época, para superar tantos infortunios en la atención de la Salud; y lógicamente, confeccionar cifras estadísticas se debe por una disposición de la concepción de la función médica en cada situación conflictiva de la población frente a hechos de morbi-mortalidad.
El tema de las relaciones entre el médico y la población que lo atiende, en el siglo XIX, estaba muy condicionada por la instrucción que recibió en la Facultad de Medicina y el espíritu que de ella adquirió. En ese siglo las dos áreas mas importantes que constituirían, luego el campo de la actividad de su profesión médica, lo eran Cirugía y Clínica Médica. Es decir, tal actividad se ejercía en forma directa sobre el paciente; y para el médico de esa época, cada enfermo era un "caso".
Recordemos que los grandes maestros de la Medicina del siglo XIX, fueron eximios conocedores de la fisiología humana; y esta si fue el primer campo de la mas amplia investigación del cuerpo humano.
Fueron los médicos del siglo XIX, que con su formación, iniciaron los primeros "números" y "cuadros estadísticos"según observaban la realidad que tenían ante sus ojos. Fueron miradas estrictas, sin aventurar verdades absolutas tras cada paciente en un auténtico "avisar" hacia el futuro los hechos con los cuales estaban comprometidos. Y este sí es un esfuerzo invalorable: informar para el futuro su presente-pasado, pues la vida es mas importante que la verdad que se supone de ella".