Existen pruebas que indican la presencia de antecesores suprahumanos que en avance a determinada civilización dio lugar a seres muy particulares. Estos no distan de la actual condición humana. Pero, en cierta forma, su apariencia se adaptó a determinados campos energéticos o condiciones de vida.

El investigador Domingo Castro, autodidacta en ciencias naturales, director del museo "Einstein", sostiene que hay culturas que "tuvieron la suerte" de que un profeta las visite. Otras recibieron a "dioses extraterrestres" y cuenta que los "Vedas" (libros sagrados de la India) hablan de los dioses del cielo; se relacionaron con los hindúes y hoy son adorados.

En Viaje a Sierras Azules sostenía: "¿Quién sabe qué tránsito humano hubo de nuestros aborígenes y "Antecesores estelares?".

Otras evidencias se recobran en resultados concretos obtenidos: la de cómo controlar la mente y tener claridad en las ideas, la de cultivar el ser creativos hacia la integridad personal y la construcción del saber. No es casualidad que el epicentro de Sierras Azules se haya tornado en un centro geográfico energético para la comunicación del hombre con lo supramundano. Es que evidencias y hechos relevados dan cuenta de ello.

En 1974 me escribió don Bernardo Razquin, desde Mendoza. El famoso meteorólogo me preguntó "qué pasa sobre los cielos de Jáchal, ¿son casos de ovnis o meteoritos?". Es que se venían observando cosas en el cielo que no eran habituales. Luis Tinto y José Muletun observaron el complejo deportivo "EL Palomar" algo extraño. Un objeto se paró sobre los arcos de rugby, quedó suspendido en el aire y luego desapareció. Era como una bola de fuego". Otros sucesos cuentan que los ven en Zonda y Jáchal cuando comienza aclarar el día después de un fuerte viento zonda.

Aseguran que se trata de un poblado huarpe y otro de capayanes. "Las noches en las que el viento Zonda despliega su mayor furia son el preludio. Al día siguiente, con las primeras claridades y bajo el amanecer totalmente diáfano que suele suceder a la tierrosa tempestad, sucede. Están ahí, a la vista de todos, tan claros como la misma mañana. Uno en Zonda y otro al Norte de Jáchal. Son dos pueblos indígenas, uno de huarpes y otro de capayanes, que se revelan ante los observadores como llegados desde otra dimensión. 13 de junio de 2005 - "Mitos populares" - DIARIO DE CUYO.