En una entrevista exclusiva desde la Conferencia de Cambio Climático (COP24) en Polonia, el ahora secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Argentina, Sergio Bergman (foto), anunció que se está preparando un Proyecto de Ley sobre Cambio Climático para tratarse en el Congreso en 2019. Ratificó este anuncio en su discurso en el Panel de Alto Nivel de la Conferencia ante autoridades ministeriales y la ONU. A partir del Acuerdo de París, firmado hace 3 años por 196 países, se han presentado compromisos de reducción de emisiones conocidas como Contribuciones Nacionales Determinadas (NDC, por sus siglas en inglés), que se diferencian por contener metas que dependen de financiamiento externo (condicionales) y otras que no (incondicionales). Aunque muchos países se han propuestos estas metas, la Conferencia polaca ha estado rodeada de rumores sobre presiones para retroceder en estos compromisos. La Argentina ha establecido metas incondicionales que aseguran reducciones en un 18% para 2030 respecto de 2010; la cifra aumenta al 37% si recibe financiamiento internacional para conseguirlo. Nuestro país se destaca porque es uno de los que ha establecido una meta cuantitativa, es decir se ha comprometido a reducir 483 millones de toneladas para 2030, lo que significa tener mayor claridad sobre las metas y no atarlas a cambios futuros. Pese a esto, la organización Climate Action Tracker, dedicada al monitoreo de datos y políticas climáticas, publicó recientemente un informe sobre el desempeño de Argentina en materia de reducción de emisiones de carbono y la calificó como "insuficiente”. Según Paola Yanguas Parra, responsable del informe sobre Argentina, las metas de reducción de la Argentina no son ambiciosas y si bien han mejorado a partir del último cambio de gobierno, sus proyecciones están lejos de lograrse. "Argentina tiene un nivel socioeconómico que los ubica cerca de los países más desarrollados. Es más, se trata de un miembro del G-20 y eso la diferencia de otros países de América latina. Entonces, cuando miramos sus metas y los logros alcanzados al momento para reducir emisiones, consideramos que deberían ser mejores de lo que son, sobre todo por las capacidades y la contribución histórica de la Argentina”, argumentó Parra.

Las negociaciones climáticas en Polonia avanzan lento y algunos de los puntos con mayor dificultad se refieren a la diferenciación de responsabilidades entre países desarrollados y en desarrollo; el eje de financiamiento y transparencia. El funcionario argentino se mostró confiado en lograr resultados al final de esta semana, cuando termina la COP. Destacó que el grupo que conforma junto con Uruguay y Brasil se muestra alineado. "Hasta que no asuma el nuevo gobierno, somos socios y seguiremos alineados en los temas climáticos”.

La próxima Conferencia de Cambio Climático le toca a América latina. Ni Brasil ni Costa Rica aceptaron las candidaturas, por lo que Chile sería una opción. Ante las incertidumbres, Corea del Sur apareció en escena indicando que si América latina no termina de definirse, se postularán para ser la próxima sede.

 

Por Nuevas Energías  Publicación especializada
Fuente: Comunicarse