Mediante una estrategia innovadora, la Universidad Nacional de Cuyo (UNC) espera destrabar la situación de los estudiantes avanzados que no logran terminar sus carreras, un problema común en nuestro país.
La iniciativa contiene un programa semestral de becas de 800 pesos mensuales y una revisión pedagógica para alumnos que hayan cursado la totalidad de las materias y adeuden los exámenes finales de dos a cinco asignaturas. El plazo máximo para recibirse es marzo de 2010.
Según una investigación de la UNC, el tiempo que los alumnos demoran en recibirse excede un 60% la cantidad de años prevista en cada especialidad, algo que también inquieta a las autoridades de todas las unidades académicas, de acuerdo a declaraciones del secretario de Políticas Universitarias de la Nación, Alberto Dibbern.
El rendimiento académico y los antecedentes del alumno, como las prácticas de ayudantías y trabajos de investigación, serán otros factores que definirán la adjudicación de las 45 becas iniciales para carreras de más de tres años de duración. Además, cada facultad profundizará el diagnóstico sobre las causas de las demoras.
Una de las dificultades, es que los retrasos se deben a que muchos alumnos trabajan y aunque tengan un plan para rendir las últimas materias, no pueden hacerlo por su obligación laboral. Esta coyuntura será flexible en la UNC, con un modelo que puede implementarse en la mayoría de las casas de estudios superiores donde hay retrasos de graduación del 20 al 60% respecto de la duración de la carrera.