La catedral de Notre-Dame de París reabrirá sus puertas el 7 de diciembre, cinco años y medio después de que un devastador incendio destruyó su tejado y su aguja y causó importantes daños en todo el edificio.

Obra maestra del gótico medieval, Notre-Dame es uno de los monumentos más queridos y visitados de la capital francesa. Sus bóvedas de crucería, arbotantes, impresionantes vidrieras y gárgolas de piedra tallada han sido celebrados durante mucho tiempo en libros y películas.

La primera piedra se colocó en el año 1163, y la construcción continuó durante gran parte del siglo siguiente, con importantes restauraciones y ampliaciones en los siglos XVII y XVIII.

La catedral fue el escenario que Víctor Hugo eligió para su novela de 1831 “Nuestra Señora de París”. Quasimodo, el personaje principal, ha sido interpretado por actores de Hollywood, entre ellos Charles Laughton, y también en una adaptación animada de Disney.

-Momento aterrador
La tarde del 15 de abril de 2019, el techo de la catedral estalló en llamas. Pronto, el fuego había consumido la aguja y casi derribado los campanarios principales. En todo el mundo, los telespectadores vieron con horror cómo ardía el edificio medieval.

El tejado se derrumbó, pero los campanarios y la fachada resistieron.

Aún no está claro qué causó exactamente el incendio. Según las autoridades francesas, pudo deberse a un fallo eléctrico o a un cigarrillo encendido.

-La ceremonia de apertura
El presidente francés, Emmanuel Macron, pronunciará un discurso ante la catedral el sábado 7 de diciembre a las 17 GMT, tras lo cual el arzobispo de París, Laurent Ulrich, golpeará con su báculo las pesadas puertas de la catedral.

Desde el interior de la catedral se cantará tres veces u salmo en respuesta a los golpes, tras lo cual se abrirán las puertas. El arzobispo bendecirá el antiguo órgano de la catedral antes de que empiece a sonar. A continuación se celebrará una misa.

Aún no se ha publicado la lista de invitados a la ceremonia de reapertura, pero una fuente familiarizada con la planificación dijo que acudiría la esposa del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, Jill, pero el presidente electo, Donald Trump, aún no ha confirmado su asistencia.

Habrá una primera misa el domingo 8 de diciembre, que celebrará el arzobispo de París a partir de las 9:30 GMT, la primera de ocho días de servicios dedicados a la reapertura y centrados en dar las gracias, entre otros, a los donantes que pagaron las reformas y a los bomberos que ayudaron a salvarla. Algunas de las misas, incluida la del 8 de diciembre por la tarde, a las 17:30 GMT, estarán abiertas al público.

-Visitas a la catedral
Se podrá visitar la catedral la tarde del 8 de diciembre, de 17.30 a 20.00 horas, pero es probable que al principio haya una fuerte demanda -y largas colas- para ingresar.

La catedral informa que, desde principios de diciembre, los visitantes podrán reservar una entrada gratuita en línea, a través de su sitio web, las redes sociales o una aplicación específica, para acceder al edificio el mismo día o uno o dos días después de la reserva. También habrá una fila in situ para los que quieran entrar sin reserva.

Los grupos solo podrán acceder el año que viene, a partir del 1 de febrero para los religiosos o del 9 de junio para los turistas con guía.

La catedral espera recibir entre 14 y 15 millones de visitantes al año. En Francia hay un gran debate sobre si los visitantes deben pagar por entrar. La Iglesia está en contra, y por ahora la visita sigue siendo gratuita.

-La reconstrucción
El dinero para la reconstrucción de Notre Dame llegó de todo el mundo, incluidos los multimillonarios franceses del sector del lujo Francois Henri Pinault y la familia Arnault. Se ha donado tanto dinero -más de 840 millones de euros (882 millones de dólares), según la oficina de Macron, que incluso sobrarán fondos para nuevas inversiones en el edificio. Las reparaciones se demoraron cinco años.

Las autoridades afirman que la catedral será más bella que nunca, no solo porque su aguja, tejado y todo lo destruido por el incendio, fue reconstruido por miles de expertos artesanos, sino también porque la piedra y las pinturas, que se habían ennegrecido con el paso de los años, se han limpiado a fondo. El mobiliario también se renovó y limpió, o se sustituyó.

No todo resultó dañado en el incendio. Por ejemplo, los trabajadores de emergencias formaron una cadena humana para sacar del peligro cálices tachonados de gemas y otros objetos de valor incalculable.

> Macron elogió a los artesanos
El presidente francés, Emmanuel Macron, elogió a los más de 1.000 artesanos que ayudaron a reconstruir la catedral de Notre-Dame de París en lo que llamó “el proyecto del siglo”, tras el incendio que destruyó la obra maestra gótica.

“Nunca habíamos visto una obra semejante. Todos han tenido una participación en el proyecto del siglo”, dijo Macron ante un auditorio en el que había carpinteros, canteros, restauradores de arte, bomberos y donantes.

“El incendio de Notre-Dame fue una herida nacional y ustedes fueron su cura, (restaurándola) a través de la determinación, el trabajo duro y el compromiso”.

Los trabajadores, entre los que hay miembros de la élite de los “Compagnons du Devoir”, un centenario gremio de artesanos considerados los mejores de Francia, estallaron en aplausos de júbilo cuando Macron concluyó su discurso con un “gracias” final.

Por Ingrid Melander y Elizabeth Pineau
Agencia Reuters