Reino Unido está a punto de acordar el restablecimiento más significativo de sus lazos con la Unión Europea desde el Brexit, buscando una colaboración más estrecha en materia de comercio y defensa para ayudar a hacer crecer la economía e impulsar la seguridad en el continente.
El primer ministro, Keir Starmer, que apoyó la permanencia en la UE, ha apostado por que la obtención de beneficios tangibles para los británicos pesará más que cualquier discurso de “traición al Brexit” por parte de críticos como el líder de Reform UK, Nigel Farage, cuando acuerde una alineación más estrecha con la UE en una cumbre en Londres.
Starmer argumentará que el mundo ha cambiado desde que Reino Unido abandonó el bloque en 2020 y en el centro del nuevo reajuste habrá un pacto de defensa y seguridad que podría allanar el camino para que las empresas de defensa británicas participen en un programa de 150.000 millones de euros (167.000 millones de dólares) para rearmar Europa.
Problemas para Argentina
El reajuste ocurre después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pusiera patas arriba el orden mundial de posguerra y de que Rusia invadiera Ucrania a gran escala, lo que ha obligado a los Gobiernos de todo el mundo a replantearse los lazos en materia de comercio, defensa y seguridad.
Esto traería problemas a la Argentina, que está tratando de reequipar sus Fuerzas Armadas que quedaron en la idenfensión por parte de las administraciones nacionales desde 1983, luego de la Guerra de Malvinas y con la amenaza que significa la alianza militar entre Reino Unido y Chile, que crea un foco de tensión en el extremo sur de Sudamérica.
Por otra parte, a principios de mes, Reino Unido firmó un acuerdo comercial completo con la UE y se aseguró cierta desgravación arancelaria con Estados Unidos. La UE también ha redoblado sus esfuerzos para cerrar acuerdos comerciales y profundizar en sus asociaciones con Canadá, Australia, Japón y Singapur.
Por Kate Holton
Agencia Reuters
