Un acuerdo que parecía muy difícil de alcanzar se acaba de concretar esta semana para que en forma consensuada se afronte la sequía en la provincia. Un total de 24 entidades privadas y estatales vinculadas al sector agropecuario firmaron un documento con seis puntos básicos que marcan una posición conjunta para generar acciones frente a la grave crisis hídrica provincial. La hoja de ruta contempla desde cambiar la forma en que se gestiona el agua de riego -para distribuir sólo lo que cada cultivo necesita y no desperdiciar-, pasando por crear un comité que se reúna periódicamente con el Gobierno para monitorear el fenómeno, actualizar los datos del estado del acuífero subterráneo, hasta revalorizar las leyes vigentes -de glaciares, humedales- o sancionar otras que sean necesarias. La iniciativa de generar un espacio de dialogo interinstitucional para abordar la sequía la tomó hace unos meses el Consejo Local Asesor del INTA, que dirige Pedro Martín. Se realizaron reuniones multisectoriales -el 11 de agosto y el 16 de setiembre-, y recién en una tercera del 27 de octubre pasado, se logró el consenso y salió el documento que será presentado al gobernador Uñac. "Todos tenían intereses distintos, pero al final, nos unió el agravamiento de la crisis hídrica", dijo Martín. En el documento se ofrecen a colaborar para afrontar la crisis hídrica.

Están enrolados en esta iniciativa y firmaron el compromiso los viñateros de la Asociación Independiente y la Federación, la Cámara de Productores Vitícolas, Fecoagro, Federación Agraria del Oeste, Asociación de Semilleros, Sociedad Rural, Consejos Asesores AER de Jáchal, Valle Fértil y San Martín, el Centro de Ingenieros agrónomos, la universidad nacional y la Católica, Sociedad de Chacareros, Instituto Nacional del Agua, Departamento de Hidráulica, el Ministerio de Producción, la Secretaría del Agua y las principales autoridades del INTA, junto con un grupo de investigadores.

> LAS PROPUESTAS

  • Comité de emergencia agropecuaria: proponen crear un comité que los represente y analice en forma integral la gestión del agua, y elabore un plan con medidas a corto, mediano y largo plazo. Y que se reúna periódicamente con Hidráulica.
  • Gestión de agua para riego: proponen un cambio de paradigma en la distribución del agua que se hace según la oferta, para pasar a hacerlo de acuerdo a la demanda real de cada cultivo. Dicen que seguir apuntando a la oferta, implica que de 4 litros de agua distribuidos por canales, solo 1 litro es utilizado por una planta. Plantean unificar información del Instituto Nacional del Agua y la Universidad Nacional sobre el volumen disponible de agua superficial y subterránea existente. También conocer la superficie real cultivada, para calcular la demanda de agua y la necesidad temporal de la misma.
  • Gestión sostenible de los acuíferos: Plantean regular y conservar el agua subterránea, actualizar el estado de pozos públicos y privados, que los entes oficiales controlen el uso. También que se promueva la formación de consorcios de regantes para el uso conjunto de pozos y cooperativas de generación de energía fotovoltaica.
  • Abordaje integral del problema: piden que se sancione una ley de Sequía que permita disponer de pozos para incorporarlos a la red de riego. También que se garantice la conservación de las fuentes de agua aplicando la normativa vigente del Código de agua, Ley de protección de glaciares y Ley de protección de humedales.
  • Distribución equitativa: para que la distribución del agua garantice la equidad proponen fortalecer con más recursos a Hidráulica, garantizar los los derechos de riego adquiridos, fomentar la instalación de riego presurizado, capacitar a productores e impulsar cultivos que usen menos agua.
  • Campaña de concientización: Intensificar las campañas publicitarias y educativas en la población sobre la sequía y el uso responsable del agua.