Los nuevos contratos de alquiler de casas o departamentos esta temporada tendrán en la provincia una suba no menor al 20% y con un tope que no creen que superará el 25%, datos que se desprenden de un relevamiento realizado entre las más importantes inmobiliarias locales. Dicen que una de las razones para que los precios de los alquileres aumenten cada año -además del impacto de la inflación-, es porque la demanda de viviendas sigue siendo muy alta y la oferta resulta ser acotada, principalmente en cuanto a casas en zonas como Rivadavia y Santa Lucía.
"Un 20 o 25% por año, es una estimación que se hace con la proyección de inflación pero que siempre se queda corta, porque la inflación real es del 35%. Acá hay una realidad que no se puede ocultar y que es la falta de viviendas, que también hay que agregarle una sobrevaloración de algunas zonas que hace que los clientes quieran cifras muy altas para poner en alquiler sus casas. Notamos que la gente ya le pone más "peros" a alquilar rápido y ahora da muchas vueltas. Hay un límite económico que hace que la gente no se vaya de cabeza en la primera oportunidad tentadora que aparece", explicó Verónica García Pareja, propietaria de la firma que lleva su apellido.
En las inmobiliarias, por ley, hacen contratos por dos años, que al primer año sufren una variante en el valor nominal de la cuota mensual. Esa práctica, si bien así presentada está terminantemente prohibida, explican que en realidad se toman el monto total por los 24 meses y allí se lo divide en 12 cuotas, con un monto más bajo y otras 12 con un valor sensiblemente más alto, contrato que puede ser rescindido antes si el locatario lo pide (ver aparte).
"Tenemos una demanda sostenida y una oferta muy limitada, diría que desde 5 años a esta parte se nota y mucho. Poniendo blanco sobre negro, hay que decir que la gente busca por lo general alquilar una casa en Rivadavia o en Santa Lucía y que el valor que pague todos los meses este entre los $1.500 y $2.000. Pero ahí nos encontramos con un problema muy notable, que es la falta de viviendas de ese tipo y así es como se cotizan y suben, primero el precio de la casa y después el precio del alquiler", dijo el reconocido empresario del rubro, Carlos Vizcaino.
Por otra parte, el marcado crecimiento de la inseguridad y los costos de los alquileres más económicos -dicen en las inmobiliarias- provocó que en los últimos 5 años la gente se incline por los departamentos y el sueño de la casa con jardín quede de lado. Pero la tendencia parece cambiar ¿Por qué? La vida en los departamentos estuvo acompañada por dos subas que repercuten mucho en el costo total: por un lado, las expensas aumentan entre un 10 y 15% por año, y las cocheras otro tanto.
"El gran inconveniente a mi entender son lo caras que están las expensas. Lo mínimo que se paga por un edificio sin ascensor y con palieres abiertos, es de 170 o 180 pesos. Y si nos venimos más al centro, no bajan de 400 o hasta 800 pesos. Entiendo que esos costos influyeron mucho para que la gente se quiera ir a una casa, donde si bien el alquiler es más alto, no debe pagar ni cochera ni expensas", apuntó Vizcaino. Por su parte, Gerónimo Zapata, dueño de una tradicional inmobiliaria que administra junto a su hijo, señaló que "hoy en día en los alquileres de departamentos, la gente se hace cargo de las expensas. Uno en el barrio San Martín, de 2 dormitorios, por expensas se paga 250 pesos mensuales. En el microcentro vas a encontrarte con algunas que te pueden pedir hasta 1.000 pesos".