El Gobierno confirmó ayer que se reunirán el sábado o la semana próxima con los conductores de taxis y remises para analizar los pedidos que manifiestan tras el aumento del Gas Natural Comprimido que dejó a estos trabajadores indignados. En un principio, los reclamos que se hicieron sentir por el incremento del combustible fueron que se les dejara de cobrar la patente, pero ahora además solicitan una tarifa preferencial en estaciones de servicios con carga de GNC para los conductores del sector.

Ese fue el motivo ayer de un nuevo corte de calles en inmediaciones del Centro Cívico (foto) protagonizado por un grupo de remiseros y taxistas, que piden que las estaciones de servicios cuenten con bocas de expendio con un valor inferior para el sector. Sobre esta solicitud es donde pondrán el ojo los funcionarios, según aseguró ayer el director de Transporte, Luis González.

‘El viernes volvemos a San Juan (dijo ayer desde Buenos Aires), y entre el sábado o el lunes nos juntaremos para tratar de ayudarlos en lo que podamos para obtener la tarifa preferencial’, aseguró el funcionario. Actualmente son una o dos las estaciones de servicios que como estrategia para captar clientes hacen descuentos a taxis y remises por la carga del GNC, pero tras la suba de precio de un promedio de 73% la inquietud es que se amplíe a todas las de la provincia.

Aseguran que esta sería la solución más viable para evitar que suban los precios de los viajes en este tipo de transporte público, y esto es compartido por el gobierno .

‘La idea es que el beneficio sea para el usuario, por eso hay que colaborar para que no aumenten las tarifas’, confirmó el titular de Transporte. ‘No podemos subir más el pasaje porque la gente va a viajar cada vez menos, ya no podemos subir más los precios’, se quejó Juan Fernández, desde el Sindicato de Remiseros, uno de los que estaban manifestandose ayer en Avenida Libertador.

Otro de los reclamos que se despertó cuando el GNC tocó el valor de $9,50 -es el promedio en la provincia-, fue el que lanzaron los trabajadores de la Asociación de Propietarios de Agencias de Remises y Taxis y los de la Unión Propietarios de Autos de Alquiler (Upada) de que no les cobren las patentes o bien que les otorguen alguna compensación tributaria.

La situación para los colectiveros es más complicada. Ayer Ricardo Salvá, presidente de ATAP dijo que el boleto de $6,75 debería subir ahora a $9 por el ajuste del combustible. Pero desde Gobierno anticiparon que no contemplarán la posibilidad de otra suba además de la que se dio el 31 de enero pasado. ‘De colectiveros no he escuchado nada más que rumores, no creo que se produzca un nuevo aumento porque en los precios ya estaban contemplados estas subas así que lo veo difícil’, aseguró el director de Transporte.