El Ministerio de Educación de la provincia, una vez resuelta la paritaria docente (el 15 del corriente mes), se puso a trabajar en la batería de pedidos de aumento que llevaron los colegios de gestión privada a las oficinas de esta repartición, o sea, aquellos que reciben subsidio del Estado provincial. Así las cosas y tomando como parámetro el 24% de suba de sueldo que recibieron los maestros, el guarismo de la inflación y los planteos puntuales de cada institución, finalmente resolvió autorizar subas en las cuotas que van del 20 al 36%, dependiendo el aporte estatal, según informó ayer la Dirección de Educación Privada. La novedad es que, los que busquen aplicarlo, tiene como fecha tope el 31 de mayo del corriente año para hacerlo, cuando años atrás el aumento quedaba ‘’abierto’’ para que lo trasladen durante el año.

La mayoría de los colegios a principio de año habían elevado la cuota, por lo que quedará en manos de cada uno la decisión de subirla otra vez. Esta medida impacta en unos 36.000 alumnos de 180 instituciones que hay en la provincia, entre nivel inicial, secundario, terciaria y especiales. En tanto que para las escuelas privadas que no reciben un solo peso del Gobierno, Educación ‘’sugiere’’ un 40% como límite de incremento, pero todo queda supeditado a la discusión puertas adentro de cada institución, entre los directivos y la comisión de padres.

‘’Hasta el año pasado nosotros autorizábamos un aumento y los colegios lo podían aplicar en el momento que lo decidieran, ya sea de forma inmediata, a mitad de año, a fin de cada ciclo lectivo, o al principio del otro, es decir cuando quisieran hacerlo. Pero ahora decidimos que si van a aplicar esta suba lo hagan no más allá del 31 de mayo’’, explicó Julio Fernández, director de Educación Privada de San Juan.

El funcionario argumentó el cambio: ‘’Esto lo hicimos para tener un mayor control, porque antes debíamos ver si el aumento que aplicaba cada colegio estaba autorizado y si era así, saber cuándo, lo que generaba confusión y tal vez cierta especulación por parte de algunos’’.

El subsidio atado al aumento

Fernández contó que en los colegios en donde el Estado aporta el 40% del equivalente a los sueldos docentes, el aumento no puede superar el 36%; los que reciben plata para saldar el 60%, el incremento tiene como tope el 30%. Por su parte, los que embolsan plata estatal para cumplir con el 80 y 100% de los sueldos, tienen autorizados subas de hasta el 27 y 20%, respectivamente. ‘’Cada caso se evalúa con los representantes legales de los colegios. En la medida que se justifiquen los pedidos, hacemos lugar y se autoriza un incremento’’, apuntó Fernández.

Igual, que el Gobierno provincial se haga cargo del 100% del dinero que va al pago de los maestros no significa que todos los docentes de un establecimiento estén amparados económicamente por el Estado. Es que si Educación da el visto bueno para que, por ejemplo, haya 2 segundos grados y 2 cuartos grados en un colegio, y si esas instituciones deciden incorporar más divisiones, sujeto al incremento de la matrícula, esos sueldos corren a cuenta de cada colegio hasta tanto exista una nueva evaluación por parte de Educación.