El Gobierno provincial tiene muy avanzado un proyecto para cambiar el esquema de regalías que se le cobra a las mineras y así aumentar la recaudación, porque en vez de deducir el 3% sobre la facturación final, que incluye la deducción de gastos de producción, se hará directamente sobre el total, al margen de los gastos.
Se aplicará para los proyectos que están en explotación y para los nuevos, aunque no precisaron cuando estará vigente. La modificación ya tiene el visto bueno de las mineras para que sea incluido en el informe de impacto ambiental, según dijeron ayer en el Ministerio de Minería provincial.
Hoy, las regalías se calculan de acuerdo al valor "boca mina", que se entiende por el valor total al que se le descuenta una serie de costos de producción que incluye ítems que van desde el mismo momento que el mineral en bruto ingresa a la planta de procesos hasta que se comercializa. Por ejemplo, si la facturación total es $1.000 y el costo operativo es de $200, el 3% se calcula sobre la diferencia entre ambos, es decir, $800. Ahora, con este cambio, se cobraría sobre el valor final de facturación y quedarían marginados de la ecuación económica los costos de producción.
Desde enero del año pasado que el gobierno viene tomando contacto con las grandes mineras para negociar esta modificación tributaria -la primera en sentarse a dialogar fue la canadiense Barrick Gold-, ya que por ley no están obligadas a aceptarlo, porque no está contemplado en la normativa nacional. Pero al igual que otros aportes, que se encuadran dentro de los denominados "fondos extra regalías" (ver recuadro), terminan siendo "extras" acordados con el gobierno e incorporados en el informe de impacto ambiental, que permiten disimular el aporte obligatorio y tan polémico de sólo el 3% en concepto de regalías mineras, que es motivo de duras críticas por parte de sectores ambientalistas y antimineros, que consideran el porcentaje que dejan las trasnacionales "insignificante” y hasta "abusivo”.
"Nosotros hemos planteado desde hace tiempo la necesidad de que las regalías mineras en San Juan sean trasparentadas y más allá de un tope máximo del 3% que establece la ley, proponemos cambiar el esquema de cálculo que actualmente tienen, que es engorroso desde todo punto de vista y no es del todo conveniente”, dijo ayer el ministro de Minería local, Felipe Saavedra. El propio gobernador Gioja, en sendas entrevistas publicadas en medios gráficos de tirada nacional, dijo que "estamos muy pronto de lograr un acuerdo de partes para que sea el 3% libre, sobre la facturación final".
En la esfera local, saben que subir el tope de la regalías mineras que se ubica en el 3% -el máximo previsto por ley- es absoluta potestad del Congreso Nacional y necesita el OK de la Casa Rosada para que tenga celeridad, tema que no es prioridad hoy en la agenda de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Por eso, mientras tanto, el Estado provincial quiere cerrar cuanto antes este "maquillaje’ en el actual esquema, para alimentar las arcas locales

