El conflicto comercial entre la Argentina y China se precipitó abruptamente ayer, luego de que las autoridades asiáticas amenazaron con disponer represalias a las barreras que sufren sus productos para entrar al mercado local, en tanto la Argentina acusó a empresas de ese país de ejercer "comercio desleal" en perjuicio de la industria doméstica, en medio de una fuerte escalada diplomática entre Beijing y Buenos Aires.

El viceministro de Comercio, Jiang Yaoping, advirtió que su Gobierno no tiene más alternativas que "considerar medidas" contra Argentina ante las quejas de sus empresarios por las políticas que aplica Buenos Aires.

Días atrás, Beiging anunció que dejaba de comprar aceite argentino de soja sin refinar hasta tanto las aceiteras argentinas reduzcan la presencia de solventes residuales del proceso de elaboración.

Pero la cuestión va más allá, por cuanto Jiang comenzó a exigir a Buenos Aires que considere a China "economía de mercado" según el acuerdo firmado por ambos países en noviembre de 2004 en ocasión de la visita del líder Hu Jintao y que es el paso necesario para que China sea considerada miembro pleno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

"A juicio del Gobierno chino, el hecho de que Argentina lance investigaciones antidumping de manera tan frecuente contra sólo un país es algo totalmente anormal y discriminatorio", criticó Jiang según informó en las últimas horas la agencia estatal de noticias del país asiático Xinhua.

El funcionario oriental detalló que "en 2009, las autoridades argentinas iniciaron 18 casos de investigaciones antidumping contra productos chinos" lo que representa "el 64% de todas las medidas de igual carácter que se tomaron en América Latina".

"Ello afectó el comercio bilateral en 247 millones de dólares, lo que representa el 56% del intercambio que (por tales restricciones) se vio perjudicado" entre China y América Latina", abundó.

Por su lado, la ministra de Industria, Débora Giorgi, salió a replicar las críticas del gobierno, al sostener que las salvaguardas comerciales aplicadas se implementaron sólo en casos de "competencia desleal" y para "proteger el trabajo nacional".

Giorgi remarcó que "en todos los casos" en que el gobierno aplicó una medida antidumping contra China "se sujetó a los procedimientos establecidos por la Organización Mundial del Comercio (OMC), donde hasta el momento no ha habido ninguna objeción formal por parte" de las autoridades de Beijing.

"Hemos actuado contra la competencia desleal, a favor de la industria nacional, el trabajo argentino, y en defensa de 600 mil trabajadores. Cada medida antidumping tiene como origen la prueba de un daño a la industria nacional", abundó la ministra.