El tiempo que ha insumido la negociación por la venta de la autopartista Delphi y la situación de la empresa ha acentuado la incertidumbre de los trabajadores sobre su futuro. Rolando Manzanelli, vocal titular de la Comisión Directiva nacional de la Unión Obrera y Empleados Plásticos (UOYEP), destacó que desde el gremio apuestan a realizar una nueva asamblea entre los empleados para el lunes 23 de este mes, con el objetivo de que voten si quieren seguir esperando el resultado de las tratativas entre la firma y el posible comprador o, por el contrario, decidir que los indemnicen, lo que implicaría el cierre de la fábrica. El sindicalista explicó que si bien la reunión estaba planeada desde antes de que el personal empezara las vacaciones, manifestó que “los operarios deben decidir, ya que no hay materia prima ni órdenes de producción y la gente no puede estar 20 días sin hacer nada”.
En diciembre, la firma Delphi, que fabrica mazos de cables, anunció que cerraba sus puertas, decisión que dejaba a 470 trabajadores en la calle, con su correspondiente indemnización. Sin embargo, por gestiones de la Nación y la Provincia, se buscó una salida para que la empresa transfiriera el paquete accionario a un comprador. Así, apareció el empresario Enrique Ruffo, dueño de Cibasa, quien encaró las negociaciones. Para garantizar que no haya despidos ni suspensiones mientras duren las tratativas, primero el Ministerio de Trabajo de la Nación y luego la Subsecretaría de Trabajo local (ver cronología) dictaron conciliaciones obligatorias. Ayer se realizó una nueva audiencia entre la autopartista, representantes del Gobierno y del gremio plástico, en la que, según fuentes que participaron del encuentro, se ratificó que, por el momento, las negociaciones continúan entre Delphi y Cibasa, despejando el rumor que había circulado en la semana de que Ruffo se había bajado del proceso de compra.
Tras la audiencia, se pasó a un cuarto intermedio para la próxima semana, aunque no se definió la fecha. Tal decisión la tomará la Subsecretaría de Trabajo en la mañana del miércoles 18. Ese día vencen los primeros 15 días hábiles de la conciliación, por lo que si se fijara otra fecha, implicaría una prórroga de la medida, que abarca otros 10 días más.
Manzanelli explicó que en la reunión de la próxima semana quieren una respuesta por parte de Delphi. Las 3 alternativas son: que Cibasa haya comprado la planta, que se haya caído la operación y que la autopartista cierre o, la más probable, que ambas partes necesiten más tiempo para seguir discutiendo la transacción. En las 2 primeras alternativas, el rumbo estaría definido, mientras que la tercera impone un tiempo de espera para los trabajadores. Si se da esta última opción, los operarios deberán decidir si siguen aguardando o si quieren que los indemnicen, en el caso de que se realice la asamblea.
No es la primera vez que los empleados votan por su futuro. A fines de enero, el dueño de la empresa Cibasa, Enrique Ruffo, les manifestó que estaba interesado en adquirir la planta y les esbozó su proyecto de trabajo. Así, los trabajadores que apostaron a la continuidad bajo un posible nuevo dueño se impusieron sobre los que preferían ser indemnizados.

