Sin nieve para medir. Hidráulica dilató el viaje a la cordillera, a la espera de otro temporal. En la imagen, Corrales de Alambre, totalmente seco. 

El fenómeno de El Niño llegó demasiado tarde a San Juan y no alcanzó a acumularse suficiente nieve en la Cordillera de los Andes, según el pronóstico hídrico que dará a conocer oficialmente Hidráulica mañana, y a cuyo borrador DIARIO DE CUYO accedió de forma exclusiva. Para la próxima temporada, de acuerdo a esa medición, esperan que el río aporte entre 650 y 700 hm3. Esto pondrá al periodo 2023-2024 entre los cinco peores años del último siglo. A esto se sumará que es muy probable que durante el verano se produzcan temporales de lluvia en alta montaña que generarán crecientes peligrosas.

Es justamente la demora en el cambio del ciclo de La Niña a El Niño lo que causará las precipitaciones tardías, explicó la directora de Hidráulica, Guadalupe López. El fenómeno climático lleva humedad desde el Océano Pacífico al continente y si esto sucede en invierno, se producen nevadas. Pero como sucederá en épocas cálidas, habrá lluvias que harán crecer los ríos de forma violenta.

El pronóstico definitivo se publicará mañana, en una reunión con regantes en el Departamento de Hidráulica. La actual directora confirmó que hasta ayer seguían trabajando en los valores finales, ya que los cateos los realizaron el pasado sábado 7 de octubre. Pero, aunque lo aportado por los viajes en helicóptero son clave en el armado del pronóstico, una mala noticia simplificó el trabajo de los técnicos: sólo 1 de las 7 estaciones tenía 20 centímetros de nieve acumulados. El resto, nada.

“Ahora creció el río y eso es preocupante. Son las últimas nevadas que se están derritiendo muy pronto”.
Guadalupe López - Directora de Hidráulica

La medición confirmó lo que ya mostraban imágenes satelitales: la mayor parte de las nevadas del invierno, que fueron pocas y leves, se evaporó, dispersó con el viento o se derritió por las altas temperaturas en montaña. La única estación meteorológica con nieve acumulada era Teatinos, que es la que se encuentra más al Sudoeste. Si bien es el punto que históricamente tiene más relevancia con respecto a la cantidad de agua que llegará después, sin el apoyo del derretimiento de otros valles, el ciclo que viene queda en la categoría de extremadamente seco.

En la historia de las mediciones de Hidráulica, sólo cuatro años el río San Juan tuvo menos de 700 hm3 de derrame anual y ambos en las dos peores sequías del último siglo. Se trata de los años 1968 y 1970, cuando los registros fueron de 627hm3 y 662 hm3 respectivamente y luego en 2020 y 2021, con 620hm3 y 550 hm3 respectivamente. La diferencia más importante entre estos dos procesos de crisis hídrica es que en el primero San Juan no contaba con embalses y esto causó pérdidas millonarias en el agro.

Según dijo López, anticipaban que podía haber un Niño tardío durante la temporada y por eso tomaron dos decisiones de cara a la próxima temporada: hacer una corta extensa en el riego para guardar agua en los diques y buscar maquinaria para encarar reparaciones de emergencia. Hidráulica contrató horas de máquina para posibles crecientes que dañen canales, rutas, defensas del río u otras estructuras. Y los departamentos cordilleranos podrían verse especialmente afectados por una temporada que será difícil para los sanjuaninos.

Esta temporada
992  hm3
aportó el río desde octubre de 2022 a septiembre de 2023. En verano se utilizó todo lo que aportó el río, más de 600 hm3, para el agro. En otoño guardaron para recuperar los diques y en agosto volvió el riego.

Semana del agua
Hidráulica recuerda un aniversario de su creación y empieza un nuevo año hídrico, que va desde el 1 de octubre al 30 de septiembre. Hoy habrá un acto en el Dique Ignacio de la Roza y mañana publicarán el pronóstico hídrico en detalle. A su vez, esta semana empieza a definirse el cronograma de riego con los regantes, de cara al próximo verano.