Buenos aires, 12 de julio.-El Gobierno dará a conocer el
próximo martes el índice de inflación de junio que, según las
estimaciones de los analistas privados, es algo inferior a 1 por ciento.

Sin embargo, se prevé que la cifra oficial sea menor a las
proyecciones de las consultoras, y rondará en 0,3 por ciento.

Este será el primer test que deberá enfrentar el flamante
ministro de Economía, Amado Boudou, en medio de las versiones sobre un eventual alejamiento del secretario de Comercio Interior,
Guillermo Moreno, y su cuestionada intervención sobre el INDEC,
especialmente sobre las cifras de inflación.

El ex titular de la ANSES expresó, en una entrevista con un
diario marplatense, que "el tema del INDEC es otro de los títulos
que hay que volver a poner en su dimensión" y dijo que "un índice de precios es precisamente eso: un índice de precios con todas las fortalezas y debilidades que tiene".

"Me parece que tenemos que ir hacia una situación en la cual
el INDEC vuelva a representar lo que realmente es: una herramienta técnica, de seguimiento de las variables en la República Argentina. Nosotros creemos que se han hecho muchas cosas buenas, hay que seguir haciendo otras, y hay que fortalecer esta institución", declaró.

Al respecto, el ministro del Interior, Florencio Randazzo,
salió a defender al organismo, y relativizó sus dichos sobre
que existen productos de la canasta familiar que subieron más de
lo que reflejan los números del INDEC.

"El INDEC tiene precisión entre los artículos que mide, pero
esto no quita que haya productos fuera de ese universo que tengan otra variación al porcentaje que refleja el organismo oficial", aclaró.

El funcionario argumentó que "es imposible que el INDEC pueda
reflejar con exactitud la variedad de canastas de productos
familiares, ya que el relevamiento se produce sobre artículos
determinados, que pueden diferir según costumbres y hábitos de consumo de cada familia".

Según las consultoras, la inflación en junio estuvo impulsada
por subas en el precio de los alimentos estacionales.

Según la medición que realiza el Centro de Investigación
Buenos Aires City de la Facultad de Ciencias Económicas (UBA), bajo la coordinación de la ex directora de Precios del INDEC, Graciela Bevacqua, la inflación de junio alcanzó a 0,6 por ciento.

El relevamiento indicó que la principal suba se detectó en el
rubro Alimentos y Bebidas (1,1 por ciento) por el alza en el pan
fresco y facturas, pastas secas, quesos duros, aceites y verduras.

Le siguieron los sectores de Equipamiento y Mantenimiento del
Hogar (0,8 por ciento) por alzas en los valores de calefactores,
cocinas, heladeras, y algunos artículos de limpieza; y
Esparcimiento (0,8 por ciento).

También se verificaron incrementos en las áreas de
Indumentaria (0,5%); Vivienda (0,4%); Atención Médica (0,4%); Transporte y Comunicaciones (0,3%); y Educación (0,2%).

"Para la segunda mitad del año las perspectivas inflacionarias
se conforman en base a dos fuerzas contrapuestas. Por un lado la
severidad de la recesión impulsa un proceso de desaceleración
inflacionario. Por otro, un conjunto de factores impulsaría la tasa
inflacionaria al alza", evaluó.

Las planillas con el detalle de la inflación serán difundidas
por el INDEC el martes a las 16.

Previamente -como ya es costumbre-, los empleados del
organismo harán, a las 13, un abrazo solidario en la puerta del INDEC, en contra de la intervención de Moreno, bajo la consigna "Basta de Mentiras. Fuera la intervención y la patota".

El costo de vida de mayo fue de 0,3 por ciento, y acumula en
los primeros cinco meses del año 2,3 por ciento.

Por su parte, la canasta básica alimentaria -índice que se
utiliza para medir el nivel de indigencia- y de la canasta total
mide la pobreza- para una familia con dos hijos se ubicó ese mes en 443,82 pesos, y 1.001,74 pesos, respectivamente.