Buenos Aires, 25 de enero.- Las cuentas del Estado Nacional cerraron el 2010 con un superávit de 25.082,2 millones de pesos, un 45,2% más que lo obtenido durante el 2009, merced a los mayores ingresos provenientes por impuestos, ligados al crecimiento del conjunto de la economía, anunció hoy el ministro de Economía, Amado Boudou.

Además del superávit fiscal, el cuasi-fiscal cerró con una ganancia de 3.055 millones de pesos, contra un déficit de 7.138,8 millones, lo cual representó una mejora superior a los 10.100 millones.

“El resultado positivo de las cuentas públicas, junto al crecimiento del Producto Interno Bruto en torno al 9%, y de la Inversión del 17,9% confirmó que el modelo económico de desarrollo con inclusión social implementado desde el 2003, ha superado con creces la difícil prueba que fue la crisis económica internacional del 2009”, dijo Boudou durante una conferencia de prensa en la que dio a conocer el estado de las cuentas públicas.

El ministro formuló estas declaraciones en compañía del secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, y el subsecretario de Presupuesto, Raúl Rigo.

Este superávit de más de 25.000 millones de pesos en el 2010 se obtuvo a pesar de que diciembre cerró con un déficit de 2.202,7 millones de pesos, resultado negativo que es tradicional para ese mes en el que se acumula una gran cantidad de pagos.

Para alcanzar el superávit anual se contabilizaron ingresos tributarios por más de 20.600 millones de pesos, unos 10.000 millones de contribuciones a la seguridad social, mas unos 21.000 millones que aportó el Banco Central en concepto de utilidades, y otros 8.600 millones de parte de la Anses, entre otros.

Pezoa defendió la política de transferencias de fondos de esos organismos al Tesoro, al asegurar que “si el Banco Central obtuvo ganancias fue porque se llevó adelante (desde el Gobierno) políticas económicas que lo alentaron, al igual que lo que ocurrió con la Anses”.

Por su parte, Boudou criticó a “quienes nada dicen” sobre la política del Gobierno Nacional de transferir más de 7.000 millones de pesos a las provincias por el Fondo Federal Solidario, cuyos ingresos provienen de una parte de lo que se recauda por retenciones a las exportaciones de soja.

En cuanto al Gasto Primario sobresalieron en el 2010 los aumentos originados por los incrementos a jubilaciones y pensiones, la Asignación Universal por Hijo, y las coberturas asistenciales.

A esto hay que sumarle los subsidios al transporte, y a la energía eléctrica, junto a la realización de obras viales.

“El Gobierno privilegió expandir y dirigir el gasto público antes que ajustar indiscriminadamente, asumiendo una iniciativa de marcado impulso fiscal”, aseguró Pezoa.

Boudou defendió la política de reducción de deuda que el Gobierno Nacional llevó adelante con los acreedores particulares, como así también la que dispuso para con las provincias.

Con la refinanciación de las deudas de las provincias que hizo la Nación, en condiciones de mercados internacionales, ahora esos Estados “podrán exhibir buenos resultados” en sus cuentas públicas, aseguró el funcionario.