A pesar de que los precios de los combustibles ya tuvieron dos incrementos durante este mes, en el sector ya adelantan que durante septiembre también habrá nuevos aumentos. Por un lado, para compensar un atraso frente a la suba de los valores del petróleo y el dólar, y por otro lado, porque el mes próximo habrá un ajuste del impuesto a los combustibles líquidos, que se calcula a partir del Indice de Precios al Consumidor.

"No habría que descartar nuevos aumentos", señaló Raúl Castellanos, titular de la Cámara de Empresarios de Combustibles de Córdoba (CECC). "Los combustibles aumentaron nueve veces en lo que va del año, es un cierto récord. Y es probable que en septiembre vuelva a aumentar", agregó.

El último aumento del año fue realizado el domingo pasado por la petrolera YPF, con subas de 0,8% para las nafta súper y el gasoil y de 9% en el caso de la nafta y el gasoil premium, luego de que el Gobierno autorizara un aumento del 5% en los valores de los bicombustibles.

A partir de esta nueva suba —la segunda en el mes—, el precio del litro de nafta en las estaciones de servicio de la ciudad de Buenos Aires alcanzó los $ 29,60 para la súpery $ 35,65 para la premium. En el caso del gasoil, los valores son $ 25,94 el litro y $ 31,19 para el gasoil premium.

Sin embargo, existe una brecha de precios cercana al 12% con los precios que se pagan en las estaciones de servicio del interior del país. Incluso, en las ciudades más pequeñas, el litro de nafta premium ronda los $ 40. "La diferencia de precios entre la ciudad de Buenos Aires y el resto del país no tiene justificaciones económicas, no tiene que ver ni con el flete ni con la carga impositiva. Son políticas comerciales de las compañía. Es algo que no es nuevo, hace varios años que tenemos estas diferencias de precios, que son importantes", destacó Castellanos. La nafta súper tiene un precio promedio de $ 34 en el interior del país, mientras que en la ciudad de Buenos Aires ronda los $ 29,60.

Luego de los últimos aumentos, ¿el precio de los combustibles alcanzó su punto de equilibrio o seguirán más aumentos? "Los combustibles vienen acumulando un atraso luego del aumento del precio de petróleo y más todavía del dólar. Algunas compañías dicen que todavía está atrasado y otras consideran que ya está. Son números finos que solo pueden hacerlo las refinadoras", advirtió Castellanos.

Sobre la situación de las estaciones de servicio, Castellanos destacó que más allá de los aumentos de precios, la preocupación de los empresarios del sector pasa por los elevados costos de funcionamiento que deben afrontar. "Necesitamos que el precio de de los combustibles acompañe la inflación, siempre y cuando no bajen los volúmenes de venta. Pero tenemos otro problema que son los costos elevados de las estaciones de servicios. Para ser sustentable, una estación tiene que tener volúmenes de venta importantes. Las estaciones más chicas no son sustentables y están cerrando", indicó el titular de la CECC y aclaró que, a pesar de una pequeña caída en junio, aún no se registran bajas importantes en las ventas.