A partir del 15 de la próxima semana, 600 usuarios comenzarán a pagar las boletas de agua con consumo medido de julio, las cuales registran si se excedieron del límite mensual establecido en 30 metros cúbicos (m3), o su equivalente, 30 mil litros de agua. Aquellos que se sobrepasen deberán abonar un recargo de 1,16 pesos por m3 de más. Como las cuentas de ese grupo terminan de cerrar este lunes, en Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE) aún no tenían los porcentajes de cuántos propietarios tuvieron un uso extra ni las cantidades. Pero la medición que la empresa estatal hizo en junio arrojó que de ese sector, el 55% supera la barrera permitida.

Así comienza a ponerse en marcha el plan que lanzó la gestión giojista con la colocación de medidores para registrar el consumo en aquellas viviendas de barrios en los que, según estudios previos, presentan un mayor uso del agua debido a que cuentan con 2 baños, piletas y amplios terrenos parquizados, por ejemplo. El primero grupo de usuarios se encuentra en el Barrio Del Bono, el Nuevo Del Bono (ambos en Desamparados) y el Profesional Foro de Abogados (Rivadavia). Aunque el mecanismo establece que se pagará por el consumo extra, el objetivo principal apunta al cuidado en la utilización del recurso vital para evitar los derroches.

Hoy, los que no tienen medidores pagan 70 pesos, independientemente de lo que consuman. Los que ya tienen instalado el aparato contarán con un descuento de movida del 15 por ciento y abonarán 59,50 pesos fijos si no se exceden de los 30 m3 mensuales. Pero si sobrepasan ese límite, deberán afrontar 1,16 pesos más por m3. Puesto en un ejemplo, si el medidor revela que consumió 20 m3 de más, la boleta será por el cargo fijo más 23,20 pesos adicionales, es decir un total de 82,70, según la información que brindó el presidente de OSSE, Cristian Andino.

La rebaja del 15 por ciento se efectúa debido a que ese lote está bajo el control de los medidores, cosa que no pasa con el resto de la población, sobre la que no hay datos precisos sobre su consumo y si derrocha o no, destacó el funcionario. Los valores corresponden sólo al uso de agua, pero la repartición estatal también cobra el servicio de cloaca (para aquellos que lo tienen), que está en 57 pesos.

En marzo de 2013, la empresa estatal comenzó a colocar los medidores y ya llegó a un total de 4 mil. Dicha medida surgió a través de un convenio que firmó el Gobierno (ver recuadro) con el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA). De ese total, OSSE le empezará a cobrar con el nuevo sistema a 600 usuarios. Esto se debe a que fueron los primeros a quienes les instalaron los medidores y por lo tanto, hicieron todas las pruebas técnicas para que el registro funcione bien. Desde abril, ese grupo comenzó a recibir las llamadas boletas testigos. Éstas iban acompañando a la factura de pago y cumplían la tarea de informar y advertir al titular de la cuenta que se había pasado del consumo permitido y marcaban lo que deberían abonar. Los 600 usuarios recibieron ese llamado de atención por 3 meses y ahora deberán pagar en el caso de que se hayan excedido. Según las mediciones de la empresa estatal, en abril, 390 consumidores (el 65 por ciento) sobrepasaron los 30 mil litros de agua. Al mes siguiente, la cifra de usuarios bajó a 372 (el 62 por ciento), mientras que en junio fue de 330 (el 55 por ciento). De esa última cifra, 120 estuvieron en la franja de los mil a 12 mil litros de consumo extra de agua, 150 usaron entre 12 mil a 50 mil litros de más y 60 se excedieron entre 50 mil y 130 mil litros. En OSSE quieren reducir los niveles más altos, teniendo en cuenta que una casa de barrio de unos 45 m2 y con prestaciones básicas llega a 25 mil litros.