Variable. La mayor o menor acumulación de nieve en la cordillera es fundamental para determinar la cantidad de agua que traerá el río San Juan. Es porque las lluvias no suman.

Según las cuentas que sacan en la Secretaría del Agua de acuerdo a lo observado hasta ahora en los mapas satelitales y por los datos que arrojan las estaciones nivometeorológicas instaladas en la cordillera, el río San Juan traerá en la próxima temporada unos 900 hm3, que es un 15% menos del caudal promedio del período pasado, que fue de 1.060 hm3. Es porque hasta ahora hubo escasa precipitación nívea en la zona de las cuencas del río, un 30% menos que en el ciclo pasado. Si bien ya pasó la temporada de nevadas fuertes, todavía hay expectativa por una tormenta que ingresó este fin de semana y que puede hacer su aporte para que haya más agua para el riego, consumo humano y la generación hidroeléctrica.

"La situación sigue siendo crítica y vamos a estar en otro año seco", dijo Edgardo Güerci, titular de la Secretaría del Agua, el organismo que coordina las tareas de 4 reparticiones, OSSE, EPSE, Hidráulica y Recursos Energéticos, que tienen que ver con el manejo del agua en la provincia.

En San Juan, aclaró el funcionario, la obtención del agua depende íntegramente de la acumulación de nieve en la cordillera, en la zona que aporta al río San Juan, porque el agua de lluvias no sirve para ese fin. Por eso la función de la secretaría, en conjunto con las cuatro reparticiones, es hacer un programa para la mejor distribución tanto para consumo de las personas como así también para asegurar el riego de los cultivos.

Maximiliano Delgado, titular del Departamento de Hidráulica, sostuvo que "vamos enfrentar otro año seco, que va a ser peor que el año pasado". Y dio a conocer su expectativa para la nieve que pueda aportar el temporal de este fin de semana.

Güerci dijo que en el 2019 vamos a completar un ciclo de 10 años, los más secos de los últimos 100 años, a partir de que en 1909 se empezaron a medir los caudales del río San Juan. Y que todo es producto de fenómenos como el cambio climático por el calentamiento global del que tanto se habla.

Frente a este panorama de poca nieve en la cordillera y que se prevé menos agua para la temporada, el respaldo es el sistema de diques con el que cuenta la provincia, construidos en cascada sobre el río San Juan, más arriba Caracoles, seguido por Punta Negra y Ullum abajo. A los que en un futuro se va a sumar El Tambolar, que está en construcción.

Hasta ahora, las principales nevadas se produjeron entre julio y agosto, "pero después no se han producido nevadas importantes", dijo Güerci, y por eso la expectativa es con el temporal de estos últimos días.

Para el 2018 se habían pronosticado 840 hm3, pero al final el río terminó aportando 1.060 hm3, aclaró el funcionario y con un 30% menos de nieve estiman que en ese ciclo el aporte puede llegar a los 900 hm3. "Los diques están para cubrir ese déficit", sostuvo el secretario, y señaló que en los últimos 3 años, por la escasez hídrica, aportaron entre 300 a 350 hm3. Además está la alternativa de lo que pueda sumar la batería de pozos. Para pasar un año sin sobresaltos por falta del recurso hacen falta, al menos, unos 1.400 hm3, dijo Güerci.

Con esa cantidad alcanza para regar las 120.000 hectáreas de cultivos con agua superficial, y de esa cantidad de tierras, unas 90.000 hectáreas están ubicadas en los valles de Tulum, Ullum y Zonda, los principales de la provincia.

Frente a este panorama, el funcionario expresó que "estamos ocupados en hacer un plan para atender la situación, en coordinación con las otras cuatro áreas".

La Secretaría del Agua hace planes plurianuales del uso del agua de los diques, que se van ajustando todos los meses, de acuerdo al comportamiento del río y al aporte de las nevadas. Para almacenar agua en los dique, se aprovecha la época de monda de canales, que además sirve para la limpieza de los canales. En octubre se verá cuánto queda acopiado en las presas, y en ese momento se volverá a programar el uso.
 

>> Sistema más preciso

Para evaluar en detalle los centímetros de nieve que caen día por día y así obtener información clave para poder confeccionar el pronóstico hídrico anual, la provincia cuenta con una red de estaciones nivometeorológicas en las cordillera. Permiten calcular con un menor margen de error la cantidad de agua que traerá el río San Juan.

Las estaciones están ubicadas en Corrales de Alambres, en el Valle de los Patos Sur; Teatinos, en la cuenca del río Los Patos, y Del Carmen, sobre el río del Valle del Cura. A estas se suman las de Pachón, sobre el arroyo Pachón; Calderón, sobre el río Calderón; Pantanosa, sobre el río Pantanosa, y Patos Norte, ubicada en la zona del río Los Patillos.

Estas estaciones sirven para medir la nieve precipitada en la zona cordillerana y contar con datos hídricos con un margen de error casi nulo.

Cálculo

900   Es la cantidad de hectómetros cúbicos (hm3) que se estima que traerá el río San Juan en la próxima temporada.

Derrame

Por la mayor temperatura en el verano, que provoca el derretimiento de la nieve, la época de mayor escurrimiento de agua es durante los meses de diciembre y enero. Recién después, con un panorama claro, la Secretaría del Agua, que agrupa a cuatro dependencias, elabora el programa de distribución del agua.