El ministro de Hacienda, Francisco Alcoba, pretende que las compras de insumos básicos que realiza cada uno de los ministerios se concentren y se hagan desde un solo organismo. Actualmente, las reparticiones tienen sus áreas específicas para esa tarea, pero debido a un mecanismo burocrático, pasan meses hasta que pagan y adquieren finalmente el bien, lo que lleva a que el proveedor cotice al doble su producto por el tiempo transcurrido. Con el mecanismo de centralización, lo que se busca es reducir ese lapso muerto y asegurarse el precio actual. A través de esa metodología, el funcionario aseguró que el Estado se ahorraría un piso de 180 millones de pesos anuales.
Eso es lo que resaltó el funcionario en declaraciones a Radio Light y según fuentes calificadas, el proyecto tiene el visto bueno del gobernador José Luis Gioja y de implementarse, se haría durante el primer trimestre del año que viene. Es que el ahorro es significativo: con ese monto, alcanzan unas 1.200 casas que construye el IPV o la pavimentación de 1.600 cuadras. De esa forma, Alcoba se encamina a avanzar en el ahorro de las erogaciones públicas que se realizan desde la administración, ya que el primer recorte que hizo fue en los gastos de cortesía, protocolo, viáticos y pasajes durante los viajes que efectúan los funcionarios para hacer tareas, gestiones o la asistencia a congresos.
El centro de compras, según explicó el ministro, comprenderá a todos aquellos gastos de consumo, como el papel que se usa en las distintas dependencias y el combustible de los vehículos oficiales, por ejemplo. El sistema está contemplado en la ley de administración financiera que data de la década del ‘90 y Alcoba quiere ponerlo en marcha. Sucede que reconoció que la burocracia en la administración pública termina generando incremento en los costos. En la actualidad, cada ministerio cuenta con su área de compra que inicia el proceso de adquisición de un producto, el cual luego desemboca en Hacienda, ya que pasa por Contaduría y es revisado por los delegados fiscales. El proveedor “te va cotizar el doble porque sabe que tiene que esperar todo un tiempo muerto, burocrático, y te lo va a vender a otro precio”. En cambio, al unificarse las compras en un solo lugar, “el mecanismo es mucho más rápido”, afirmó Alcoba, quien destacó que “con precios testigos, cuando llamo a comprar, no me van a permitir que me cobren más”.
El ministro aclaró que para poner en práctica el sistema “tenemos que ser muy ordenados, ya que implica una previsión. Con tiempo, tengo que decir: necesito comprar tanto de combustible para la Policía, tanto de papel para las reparticiones”.