Al cabo de los cinco primeros meses del año, la coparticipación federal de impuestos que recibe San Juan acumula una contracción del 1,31 por ciento en relación a lo presupuestado. La provincia tenía previsto embolsar hasta mayo 2.069 millones de pesos, pero las cifras oficiales demuestran que desde la Nación llegaron 27 millones de pesos menos. En el Ministerio de Hacienda aseguraron que se trata de una leve baja, que no complica el cumplimiento de las obligaciones que debe afrontar este año el Estado.

La coparticipación es el mecanismo ideado para que la Nación reparta entre las provincias una parte de lo que recauda por impuestos. Para la mayoría de los distritos es clave, porque representa la principal fuente de recursos. Para tener una dimensión del impacto que tiene, en el Presupuesto 2012 de San Juan los recursos tributarios de origen nacional son equivalentes al 76,5 por ciento (el resto son fondos de la recaudación nacional y de origen no tributario).

El comportamiento de la coparticipación federal en lo que va de 2012 contrasta según sea la referencia. En relación a los primeros cinco meses de 2011, por efecto de la inflación y el crecimiento de la actividad económica, ésta última más moderada que en años anteriores, la provincia recibió más dinero. Y si se la compara con lo presupuestado, el resultado es inverso.

En función de los números que informó la Secretaría de Hacienda de la Nación, San Juan proyectó recibir hasta mayo un total de 2.069 millones de pesos de coparticipación. Los datos de Hacienda de la provincia indican que en ese periodo han escurrido 2.042 millones, lo que representa en términos nominales una retracción de 27 millones.

En la discriminación mes a mes, siempre comparando los recursos que ingresaron a la provincia con los que se presupuestaron, enero es el único que tuvo un resultado positivo: la expectativa se superó por un margen de 16 millones de pesos. Pero a partir de febrero y hasta mayo, la curva de fondos nacionales ha arrojado resultados negativos (ver infografía).

La caída más importante se registró en abril. Sólo ese mes, llegaron 15 millones de pesos menos de lo que se había previsto en la ley que fija el esquema de recursos y gastos provinciales.

Desde que comenzó la era kirchnerista, en el año 2003, es la primera vez que hay una baja durante cuatro meses consecutivos. De todos modos, el fenómeno no parece haber hecho mella en las finanzas provinciales. El ministro de Hacienda, Aldo Molina, antes de viajar a Nueva York invitado por el Banco Mundial, habló de la brecha que faltó para la pauta presupuestaria y aseguró que no pone en riesgo los compromisos de pago del Estado sanjuanino.

Ya desde los meses anteriores, el alfil giojista viene advirtiendo que San Juan tiene sus cuentas ordenadas, que no se ha excedido en los gastos que planificó para 2012 y que el financiamiento está asegurado. En consecuencia, aseguró que hasta el momento no hay nubarrones a la vista para las obligaciones de pago (ver foto).

La contracara ha sido la recaudación local, que en este caso permite compensar y hasta superar holgadamente la diferencia negativa de la coparticipación. Los datos divulgados por la Dirección General de Rentas dan cuenta de que el acumulado en los primeros cinco meses llegó a los 460,9 millones de pesos, lo que implica casi 78 millones más de lo que se proyectó.