Sin dar mayores precisiones y reservando las cifras para el próximo ajuste de pronóstico -se anunciaría el 23 de febrero-, el titular del INV Guillermo García luego de presidir ayer la reunión de la Comisión Asesora Técnica, advirtió ayer "según los primeros relevamientos realizados en campo y la observación de varios productores, la próxima vendimia podría concluir con valores similares a los del 2009". Y agregó que "es importante la merma que registraría la cosecha 2010 con respecto a los datos del último pronostico de temporada". El domingo pasado DIARIO DE CUYO adelantó que se iba a cosechar menos de lo pronosticado por el INV, pero ayer el titular del INV deslizó un panorama aún más sombrío: Que directamente no habría un incremento del 23% en la producción total país como suponían los datos de fines de diciembre, que para San Juan daban un incremento del volumen de cosecha por encima del 17% y para Mendoza del 25%.

Las olas de calor -se las considera así cuando se registran más de 5 días consecutivos con temperaturas por arriba de los 35¦-, el granizo, la humedad, los fuertes vientos y las restricciones de agua registrados en las principales zonas productivas de San Juan y Mendoza son los responsables de ese efecto, según lo que se dijo ayer.

Por su parte, el vicepresidente del INV, el sanjuanino Héctor Voena insistió en un panorama preocupante para la producción de San Juan: "Este año el granizo se llevó alrededor de 35 millones de kilos de uva entre los distritos de Cochagual y 25 de Mayo", y advirtió sobre los casi 20 días consecutivos que tuvo la provincia con temperaturas que superaron los 35¦, fenómeno que es como una "bomba de tiempo para las vides".

En su primer pronóstico de diciembre pasado, el INV estimó en el primero de sus tres pronósticos que en Mendoza podrían cosecharse 1.933 millones de kilos de uvas (un 25% más que la vendimia pasada) y 705 millones en San Juan (un 17% más), o sea, un total para el país de 2.500 millones de kilos (un 23% más).

Durante la temporada 2009, las tormentas y otros accidentes climáticos redujeron la cosecha a 602 millones de kilos en San Juan y 1.430 millones de kilos en Mendoza, lo que ya era una baja importante respecto al año anterior. En el 2008 se cosecharon en Mendoza 1.820 millones de kilos de uvas y 807 millones en San Juan. La mayor producción de las últimas temporadas se dio en 2007, cuando se recogieron en San Juan casi 860 millones de kilos y en Mendoza 2.000 millones.