Colas: ayer las estaciones de servicios tenían gran afluencia de automovilistas. La gente tenía temor de desabastecimiento y de aumento de precios. Esto último dicen que sucederá, pero a partir de la semana próxima.

Ayer, la jornada en la provincia de San Juan cerró en una tensa calma y efectos dispares en sectores de la economía tras el descontrol del "jueves negro" y la abrupta escalada del dólar.

Por un lado, este viernes hubo alivio cuando la divisa norteamericana bajó hasta los $37,40 que marcó el banco Nación al cierre; y por otro ahora las expectativas están puestas en las medidas que el Gobierno nacional anunciará el lunes para intentar equilibrar la economía, y al mismo tiempo avanzar en la reducción del déficit que exige el FMI para otorgar financiamiento (ver página 4). En medio de toda esa incertidumbre económica y con una nueva devaluación del peso que será difícil de revertir, algunos sectores ya acusaron el impacto. 

El principal, y que más efectos produce en forma indirecta es el aumento de los combustibles. Este fin de semana finalmente aumentó y se prevé que sea un 10 por ciento, en forma escalonada, lo que sin duda impactará en fletes de todo tipo de mercancías en general y sobre todo en los precios de los alimentos afectando la economía familiar.

Al respecto, ayer la mayoría de los supermercados y almacenes dijeron que por la devaluación del jueves aún no se han tocado los precios en las góndolas, y algunos habían normalizado la provisión por parte de los proveedores. Fuentes del sector también aseguraron que este fin de semana continúan las ofertas previstas. Una situación similar se vivía en las farmacias de la provincia. Otro aspecto es el aumento de la tasa de interés de referencia dispuesta por el Banco Central, que ahora llega al 60%, lo que complicará desde hoy el uso de la financiación a través de las tarjetas de crédito.

"No creo que de esto se pueda salir sin costos", dijo el gobernador Sergio Uñac por la mañana, al hablar de la crisis que se ha desatado en el país. El Gobernador agregó que el gobierno debe tomar "rápidas acciones que tranquilicen a la sociedad en general porque hablar sólo de los mercados es como una cuestión intangible que no sabemos qué pueden expresar. Las palabras y hechos deben ir dirigidas a la sociedad". Opinó que la "desconfianza se expresa en la economía" y por ello consideró que ""hay que revisar rápidamente las medidas de política económica". "Debemos dejar de mirar sólo el ajuste y empezar a mirar cómo tener un mínimo crecimiento, cómo reinventarse para alcanzar el equilibrio fiscal de la manera menos dolorosa para los argentinos", concluyó.