No les incomodó esperar 4 horas y que el Sol pegara sin contemplaciones. La expectativa de los adjudicatarios pocitanos dio paso a la emoción cuando Cristina apareció en pantalla para entregar el barrio de 86 viviendas que se levanta en calle Mendoza, entre 13 y 14. Pasa que los beneficiarios llevaban años anotados en el padrón del IPV y el sueño de la casa propia, al fin se hizo realidad.
La protagonista estelar del acto fue la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien se contactó a través del sistema de videoconferencia. Fiel a su estilo, mantuvo entretenidos diálogos con el gobernador José Luis Gioja y una sentida charla con una familia adjudicataria.
Aunque en el Gobierno destaquen que el contacto presidencial se da en un marco institucional, lo cierto es que se realizó un día después del inicio formal de la campaña electoral de cara a las primarias de agosto. Y al oficialismo le viene como anillo al dedo para mostrar que los recursos nacionales se materializan en obras, lo que le sirve para exhibir gestión y solución a problemas cotidianos.
Precisamente, el barrio pocitano, llamado Velert, fue financiado con el plan nacional “Techo Digno” y costó cerca 12 millones de pesos. Al acto de entrega asistieron las 86 familias que habitarán el complejo y que aguantaron ansiosamente desde la convocatoria al evento, a eso de las 11, hasta que terminó el contacto con la Presidenta, cerca de las 15. En la inauguración, el oficialismo mostró a los candidatos titulares y suplentes de la lista que buscará las 3 bancas de diputado nacional que están en juego. Además, los jóvenes de la JP y la agrupación Kolina se movilizaron y coparon el lugar. También estuvieron los militantes de Unidos y Organizados, quienes sólo se quedaron para el discurso de Cristina.