En la Declaración de Impacto Ambiental que les aprobó el Gobierno a las mineras Barrick, por Veladero; Minas Argentinas, por Gualcamayo y Troy Resources, por Casposo; sólo se hizo mención a que debían ‘priorizar’’ la toma de empleo local -el más próximo al lugar donde radica la explotación-, sin especificar los porcentajes, como por ejemplo sí hizo Mendoza.

Según lo informado por Minas Argentinas, trabajan en la mina jachallera 674 personas de forma directa, de las cuales 274 son de San José, 38 de Huaco, 55 de Guandacol, 10 de Iglesia, 267 del resto de San Juan, 28 de otras provincias y 2 extranjeros. Además, y de forma indirecta, Gualcamayo dispone de 681 personas que trabajan para contratistas

En tanto que Casposo ocupa directamente 203 personas: 142 de Calingasta, 53 del resto de San Juan y sólo 8, entre empleados nacionales e internacionales; mientras que 172 trabajadores más están vinculados al proyecto a través de firmas contratistas, en donde 89 son calingastinos y el resto de otros departamentos de la provincia.

Por último, la mina Veladero, que es la mina en explotación más grande de San Juan, tiene 1.198 empleados directos, según informó la división Comunicaciones de la compañía canadiense, aunque no detallaron a que zonas de la provincia pertenecen. En forma indirecta, esa cifra trepa hasta los 3.200.