El mega proyecto de cobre calingastino El Pachón arrancará con las obras de armado de campamento e infraestructura en el 2013 y estiman estar iniciando la etapa de producción en el 2016, según confirmó ayer el gerente de proyecto de la firma Xstrata Copper, Xavier Ochoa. Este dato se conoció en el marco de la presentación del Reporte de Sostenibilidad 2010 (ver aparte).
Además, adelantaron que a principios del segundo trimestre del 2012 entregarán el informe de impacto ambiental. La inversión se estima en 4.100 millones de dólares -Pascua-Lama ostenta 3.000 millones de dólares-.

‘Si todos los tiempos se dan y todo anda bien, en 2013 empiezan las obras en El Pachón‘, dijo ayer Ochoa. Los ‘tiempos‘ están sujetos a distintos factores. Por un lado, que el Gobierno apruebe el proyecto; y por el otro, que el directorio de la empresa resuelva ejecutar de inmediato la explotación, para lo cual deberá tener la liquidez necesaria.

Hasta ahora todo marcha sobre rieles -explican los directivos-, porque luego de una batería de perforaciones que se iniciaron en diciembre y terminaron hace un mes, se confirmaron los buenos rindes del yacimiento. ‘Ya tenemos algunos resultados, donde se ha confirmado la viabilidad del yacimiento a nivel de calidad de reservas, lo cual nos da un confort y una certeza muy importante‘, explicó Ochoa. Sólo esta última campaña demandó más de 45 millones de pesos de inversión.

El Pachón es comparable con Pascua-Lama, no sólo por el volumen de inversión sino porque también tendrá las características de un proyecto binacional. Es que si bien la totalidad del yacimiento está en San Juan, lo cierto es que las instalaciones para el transporte y filtrado de cobre se instalaran en el distrito de Choapa, en la región de Coquimbo.

Impacto ambiental

‘Durante el segundo trimestre del 2012 nosotros vamos a estar presentando este informe, pero aún quedan algunos trámites por hacer. La idea es hacerlo con celeridad, pero queremos tener todo cerrado para que una vez que se apruebe arrancar cuanto antes‘, precisó Ochoa. Este es un punto clave, porque El Pachón, por su ubicación a más de 3.600 metros de altura, se sabe que se emplaza en una ‘zona sensible‘ en cuanto a la posible afectación de glaciares, cuestión que obligó -pos aprobación de Ley de Glaciares- a un replanteo del proyecto, para así tener serias chances de obtener la Declaración de Impacto Ambiental.