Con la intención de recuperar mercados para la uva en fresco de San Juan, en particular Brasil, principal destino de la fruta local, en el Gobierno provincial van a intensificar la lucha contra la Mosca de los frutos. Será a través de una campaña con dos frentes. Por un lado la liberación de moscas estériles, que significará casi triplicar la cantidad empleada el año pasado, al pasar de unos 96 millones de moscas a 320 millones en la temporada actual. Y por otro lado, retomar después de 5 años la campaña de trampeo masivo en particular en aquellas zonas que tienen mayor valor comercial. Para hacer frente a la plaga, calculan que van a destinar unos 360 millones de pesos, según dio a conocer el ministro de la Producción, Andrés Díaz Cano.
La Mosca de los frutos es considerada una de las plagas con mayor impacto económico para la producción frutihortícola de la Argentina, y en San Juan también, debido a los daños que produce en la fruta y a las mermas económicas asociadas. Y es porque tienen dos efectos. Primero, pérdidas directas, debido a la merma en la producción. Y también indirectas, por las restricciones a la exportación o necesidad de aplicar tratamientos u otras medidas, que representan incrementos en los costos.
La coordinación de la campaña está a cargo del Luis Kulichevsky, al frente de la Dirección de Sanidad Vegetal, Animal y Alimentos. El funcionario explicó que la intención de intensificar la campaña “con la expectativa de ganar mercados para la uva de mesa, tanto interno como Brasil”.
De acuerdo al trabajo previsto, ya comenzó la entrega de trampas a productores de uva de mesa y pasa y de frutales de carozo de los departamentos Albardón, Pocito, Ullum y Zonda de trampas Multilure, junto con su correspondiente cebo atrayente específico para los insectos. La técnica de control se denomina trampeo masivo por que se basa en la instalación de una numerosa cantidad de trampas en el perímetro de los cultivos con el objetivo de capturar y matar principalmente hembras de moscas de los frutos y así evitar su reproducción.
También habrá colocación de trampas en la zona urbana, abarcando algunos barrios del Gran San Juan.
La otra parte de la campaña empezará en unos 20 días, con la liberación de moscas estériles. La técnica del insecto estéril implica la cría en masa y la esterilización, por medio de la radiación, de los insectos causantes de la plaga. Una vez esterilizados, se procede a la suelta zonal sistemática de los machos desde el aire en unas zonas definidas, donde se aparean con hembras silvestres sin que haya descendencia, con lo que se reduce la población causante de la plaga.
“Nuestra expectativa es llegar a los mercados de Brasil sin bromurar y para eso hace falta cuidarse de estas plagas, como la mosca de los frutos, la Lobesia, y una plaga nueva que es la “falsa arañita de la vid”; dijo el director.
Para eso van a liberar unos 20 millones de moscas estériles por semana desde fines de noviembre a marzo, con lo que se calcula que llegarán los 320 millones en 16 semanas. El año pasado, por la pandemia, se liberó mucho menos cantidad, unos 6 millones por semana, con lo que completaron unos 96 millones de moscas.
“Queremos mejorar el estatus sanitario de la provincia y eso se lograr con disminuir la cantidad de la plaga y llegar a una baja prevalencia”, explicó. Y aclaró que “la idea es que parte de la uva se exporte sin bromurar”.
El principal destino de la uva de mesa de San Juan ha sido Brasil y después hay otros destinos como Europa, Rusia y Estados Unidos.
La mosca tiene baja prevalencia en Calingasta, pero en otras zonas tiene más presencia como Ullum, Zonda, Pocito y Albardón.
Lobesia botrana
Este año San Juan destinará $300 millones de pesos en instrumentar las medidas necesarias para la campaña de lucha contra la Lobesia botrana, conocida popularmente como polilla de la vid. Si bien es la misma suma de dinero que el año pasado, el combate será más eficiente porque tras varios años de pruebas, las provincias vitivinícolas han reemplazado el insecticida que se venía usando, por otro igual de eficaz, pero a mitad de precio que el anterior.
Hasta el año pasado, el insecticida más usado y también el más caro, era Coragen, y ahora ha sido reemplazado por la marca Intrepid, que al igual que el anterior es amigable con el medio ambiente. Respecto a los fondos para la campaña 2021/22, la Provincia ya recibió por segundo año consecutivo la ayuda nacional comprometida, que consiste en un desembolso de $191.950 millones, un 41% más que los $136 millones recibidos el año pasado. El Gobierno local pone el resto de los fondos para llegar a los $300 millones que costará la campaña.
