El mercado viene aterrizando desde precios relativamente altos -llegó a rondar 1,40 por litro en el granel de los escurridos- amoldándose a valores más acordes a la realidad del mercado -entre 0,90 y 1,00 por litro se movía esta semana- que sigue con los grandes fraccionadores reticentes con bodegas abastecidas. El mosto sulfitado se mueve entre 0,95 y 1,00 peso y los grandes protagonistas, los tintos medios, rondan los 2 pesos.
Los actores de la vitivinicultura se esmeran en estos días para evitar que este aterrizaje no perfore un piso que haga peligrar la rentabilidad. Por eso, este martes, el gobernador Celso Jaque y el ministro de la Producción, Raúl Mercau saldrán al ruedo con algunas medidas que procuran moderar la baja, pero sin apelar al intervencionismo que ha sido característica histórica. Los primeros indicios señalan que -en coordinación con el gobierno de San Juan- habrá asistencia crediticia a tasa cero a través del Fondo de Transformación, para alentar exportaciones de vinos y mostos, que alivien las existencias de granel. Simultáneamente, se sigue coordinando la tarea de promoción del consumo en el alicaído mercado nacional. Es que como telón de fondo se evidencia una importante caída en los despachos en el primer semestre del 2010 (12 % menos en relación a igual período del año pasado).
De todas maneras, a pesar de los recientes reclamos de algunas entidades de productores del Este mendocino y de San Juan (pidieron créditos para retención y postergación de los compromisos financieros), no habrá medidas de intervención directa por parte de los gobiernos -del tipo operativos de compra de vino, por ejemplo- sino incentivos a las exportaciones de mosto y los graneles, aportando auxilio financiero. Ambas medidas intentan preservar el equilibrio de existencias y salidas futuras, previniendo un escenario de una posible buena cosecha 2011, que podría sumar volumen en contraste con la caída de los despachos 2010. De allí la atención a las exportaciones a granel y al mosto como regulador natural del mercado. Sacar del total de la futura elaboración entre el 25 al 30% a mostos, es una buena herramienta para aliviar la presión de las existencias. Y promover exportaciones a granel a los mercados tradicionales implicará volver a ecuaciones de equilibrio. Pero también juegan un papel importante las expectativas. En este sentido se prevé que para el año que viene haya una importante recomposición de stock en los tintos. Hay fraccionadoras -de las grandes- que no van a querer repetir las experiencias de quedarse sin tintos, o sea que esa absorción de una parte de la elaboración, va ayudar también en los equilibrios.

