Los empresarios del sector dicen que hubo dos hechos que empujaron el negocio: el primero fue que se viene manteniendo la brecha entre el precio de las naftas y el del Gas Natural Comprimido (GNC) y el segundo fue el anuncio de que los valores de este último tipo de combustible se mantendrán hasta fin de año. Lo cierto es que en los últimos meses, a partir de junio, se nota una escalada que ronda ahora en casi un 50% en la instalación de equipos de GNC en los vehículos, frente a los meses de abril y mayo, que fueron los más bajos de este año.

De a poco el negocio viene mejorando, reconocen en el sector, aunque todavía no se alcanzan los picos de conversiones del año pasado, cuando por ejemplo en marzo se llegaron a instalar 205 equipos, frente a los 121 de agosto, el mejor mes del 2017, según los datos del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas).



En San Juan, el precio del metro cúbico de GNC promedio oscila entre los 10 y los 10,50 pesos, al tiempo que el del litro de nafta se ubica entre 20 la súper y 23 la premium. Este fue uno de los factores que incidió en la mejora de la actividad. El otro fue el adelanto que hizo la titular de la Cámara de Expendedores de Combustibles de la provincia, Analía Salguero, quien dijo que por una menor carga en los impuestos la intención es mantener las actuales tarifas hasta diciembre.

Lo cierto es que usar el GNC es mucho más económico que los combustibles líquidos, como explicó Daniel Ruiz, de Segas. Es porque el ahorro es de alrededor de un 60% con GNC. Por ejemplo, si un automovilista gasta 1.000 pesos mensuales de nafta, con GNC ahorrará 586 pesos. Además, un metro cúbico de gas rinde un 13% más que un litro de nafta.

Si se habla de costos, instalar un equipo de GNC de los llamados de tercera generación, aptos para vehículos anteriores al 2012, hay que pensar en contar entre 13.000 y 17.000 pesos. Para los autos más nuevos hace falta un equipo de quinta generación, que demandará una inversión del orden de los 20.000 pesos. También hay financiación, con el plan Ahora 12 de la CAME, en 12 cuotas con 15% de interés. Y el plan Ahora 18, que es para compras de jueves a domingo, tiene un 20% de interés.

Guillermo Vila, de Willy GNC, dijo que las ventas han mejorado y que están recibiendo muchas consultas, pero todavía muchos no se animan porque tienen los cupos de las tarjetas comprometidos y los montos de la operación son considerables.

Para quien ya cuenta con GNC en su vehículo, la renovación anual de la oblea cuesta unos 400 pesos y la prueba hidráulica del cilindro más la oblea tiene un costo de unos 1.300 pesos, según los precios sugeridos por la cámara que agrupa a los empresarios de esta actividad.

En el sector, se adjudica la crisis por la que atravesó la actividad al precio del gas y a la incertidumbre de cómo iba a evolucionar en el marco de una política energética que no daba certezas. Por el contrario, el alza abrupta del precio del gas domiciliario generó preocupación en los usuarios, y por eso demoró la decisión en muchas personas hasta tener mayor certidumbre sobre cómo repercutiría en el precio del surtidor.

En la Nación


A nivel nacional, la comercialización de equipos de GNC alcanzó en agosto a 8.586 unidades, con lo cual logró por primera vez en el año estar por encima de la cifra registrada en el mismo mes de 2016, cuando se vendieron 8.557 equipos.


“El mercado está incrementándose mes a mes, luego del bajón sufrido porque la gente creyó que el ajuste en las tarifas del gas se traduciría en un fuente aumento en el precio del combustible”, dijo el presidente de la Cámara Argentina del GNC, Julio Fracchia.
En Argentina, hay 1,6 millones de vehículos con GNC, sobre un parque automotor de 12,5 millones, lo que representa el 13,5% del total.