Se avecina una tormenta este año sobre la próxima cosecha de uvas y los actores del sector quieren estar preparados para afrontarla. Por eso hoy en la reunión de la Mesa de Consenso Vitivinícola de San Juan, el ámbito que reúne al Gobierno provincial con el sector privado, se pondrán sobre la mesa al menos 8 de los temas más álgidos que amenazan al sector, con la idea de que entre todos se busquen modos de solucionarlos o al menos, atemperarlos; cuando faltan 5 meses para iniciar la recolección de racimos. "Hay varios temas por tratar", aseguró el ministro de Producción, Andrés Díaz Cano que convocó al encuentro. Un sondeo entre los que irán permitió identificar los siguientes: el excedente vínico de esta año, la falta de fondos nacionales para continuar la lucha contra la Polilla de Vid, los precios bajos de la uva y el vino, un freno a la plantación de viñedos, la reconversión vitivinícola, la tarifa eléctrica, el combustible y la reconversión de sistemas de riego a energía fotovoltaica. Para los principales referentes de las cámaras participantes, el tema clave será el sobrestock de alrededor de 500 millones de litros de vinos que atenazará a los productores tirando abajo los precios de la nueva cosecha. El año pasado se cosechó mucho y bueno, pero la venta al mercado interno y externo no acompañó; y ahora sobra mucho vino. Este exceso es un dolor de cabeza también para las bodegas trasladistas -las que más abundan en San Juan- que al tener las vasijas llenas no podrán recibir la nueva molienda que se avecina. En la Cámara Vitivinícola, que nuclea a este tipo de bodegas; dicen que la Nación no ha tomado conciencia de la gravedad del tema. ""Están esperando que las estanterías se terminen de caer para llamarnos", se quejó ayer Angel Leotta, que dirige esta cámara y es también el presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina. El bodeguero considera que la única salida para el actual excedente vínico (ver infografía) debe articularse con políticas público-privadas de la Nación, que hasta ahora no da respuestas. También propondrá insistir con el reclamo de fondos a la Nación para continuar la lucha contra Lobesia Botrana

Para este problema, desde el sector de los productores se desempolvan viejas propuestas. Juan José Ramos, titular de la Asociación de Viñateros Independientes (AVI) propondrá correr un mes la fecha de liberación de vinos en el 2019 -del 1 de junio al 1 de agosto-, porque considera que al postergar el permiso a los bodegueros de sacar a la venta el vino nuevo sirve para sacar el viejo y que no caigan los precios. ""Pero al mismo tiempo se debe bloquear un 15% de vinos para que sean destinados únicamente a la exportación", agrega Ramos. Propondrá que esto lo hagan los gobiernos provinciales por decreto, para evitar que las grandes industrias especulen con grandes volúmenes para pagar menos al productor. ""Si no son estas medidas, lo otro es que la Nación ponga $300 millones y compre los 500 millones de litros de excedentes", tiró Ramos. Aseguró que eso ""no es nada" frente a los $2.000 millones que significó la importación de 100 millones de litros de vinos que el macrismo permitió y que hoy agrava el sobrestock. La AVI también propondrá discutir los precios bajos que tiene el sector. El litro de vino blanco hoy cuesta $6,50 frente a los $8 de cuando terminó la cosecha, con una tremenda devaluación en el medio. Limitar la plantación de nuevos viñedos y fomentar una reconversión de variedades poco competitivas, son los otros temas.

José Molina, presidente de la Cámara de Productores Vitivinícolas, pedirá analizar salidas para afrontar el tarifazo eléctrico y de combustible. Respecto a este último punto propone reclamar en la Nación para conseguir un gasoil para el agro, con precio diferencial. Otra moción será la de buscar financiamiento para reconvertir a energía solar los pozos de bombeo y sistemas de riego en las fincas.

Ámbito de discusión de toda la cadena   

El 22 de enero de 2016 tuvo lugar la primera reunión de la Mesa de Consenso Vitivinícola de San Juan. El encuentro estuvo encabezado por el ministro de Producción, Andrés Díaz Cano. En esa oportunidad se habló de las medidas que se iban a tomar en cuanto al substock vínico y el aporte de la Nación, además de la eliminación de retenciones. Se habló también de la rentabilidad de los productores y la situación de los exportadores. En posteriores encuentros se trataron temas tales como la apertura del mercado de China a la uva de mesa, la Corresponsabilidad Gremial y el acuerdo de mostos con Mendoza.