Buenos Aires.- Mientras se espera la difusión del primer índice de inflación del INDEC de la era Macri, los relevamientos disponibles indican que los precios minoristas subieron en mayo entre el 3,5% y el 3,9%, según se mire al IPC Congreso o al relevamiento realizado por la agencia especializada Reuters entre un conjunto de analistas.
Los datos privados que promedia el Congreso muestran una suba de precios del mayo del 3,5%, algo inferiores al promedio del 3,9% y la mediana del 3,8% de los datos que relevó Reuters entre seis consultora locales.
El mesa pasado, las subas estuvieron lideradas por un alza en combustibles y los remanentes de incrementos en tarifas de servicios.
El miércoles, el INDEC dará a conocer su primer Índice de Precios al Consumidor del Gran Buenos Aires (IPC GBA) desde que se declaró en “emergencia” apenas comenzó el actual Gobierno. El instituto hizo en abril el primer relevamiento con su nueva canasta y metodología, por eso el primer índice es el de mayo (que compara contra abril). En principio, no debería haber datos sobre acumulados ni de inflación a 12 meses, por el cambio metodológico.
La inflación del quinto mes del año se explica “por el remanente en la suba de la tarifa de gas y en el precio del colectivo (autobús) y los trenes”, sumado al “impacto que tuvo el aumento en cigarrillos y naftas”, afirmó Santiago Mosquera, de la consultora Estudio Bein y Asociados.
“El rubro alimentos y bebidas (de amplia relevancia en el indicador) se incrementó 2,6%”, añadió Mosquera.
El economista y ex presidente del Banco Central Rodolfo Rossi coincide en que la inflación de mayo es “consecuencia del aumento y arrastre de las tarifas de colectivos, gas, nafta, cigarrillos”.
Las proyecciones de los encuestados van de un mínimo de 3,4% y un máximo de 4,8%. Los analistas calculan que la inflación en 2016 podría alcanzar hasta un 40%, pese a que el índice de precios al consumidor se moderaría en el segundo semestre, debido a los incrementos de tarifas que aplicó el Gobierno en la primera mitad del año.
Fuente: Cronista