Los gobiernos de San Juan y de Mendoza coinciden en que la exportación de vinos a granel sería la solución para eliminar un exceso de casi 200 millones de litros de vinos producidos este año, que mantiene hundidos los precios en el mercado.
Y también coinciden en que tendrán que destinarse fondos, en forma de ayuda o subsidio no reintegrable, para alentar a los privados a exportar porque los precios argentinos no son competitivos en ese rubro actualmente en el exterior. Pero lo que ya preanuncia una gran polémica es quien pondrá esa plata: El gobierno de San Juan quiere que se hagan cargo exclusivamente en Mendoza ‘’porque los excedentes se han producido en esa provincia’’, dijo ayer el secretario de Agricultura, Marcelo Alós.
Además, altas fuentes oficiales revelaron que existe un gran malestar en San Juan hacia los mendocinos a quienes le echan la culpa por el exceso de vino que ha terminado desequilibrando todo el mercado entre oferta y demanda, determinando una fuerte caída en el precio del vino en la región: ‘’Primero acordamos una cosa y después hacen otra. Acordamos elaborar un porcentaje de mosto y no lo cumplieron, acordamos un precio por el mosto y no lo cumplieron y después, salieron a subsidiar al vino blanco, se cortaron solos y les fue muy mal’’, dijo una alta fuente evidenciando el enojo que reina aquí respecto a esa provincia.
Es que de debido a la diversificación que ha hecho San Juan, al destinar uvas a mostos, pasas y uvas en fresco, no hay sobrestock de vinos, como sí lo hay en Mendoza donde no cumplieron con los pactos. Incluso, en un momento se especuló con que podría haber una reunión de gobernadores, algo que desde San Juan fue descartado categóricamente. Lo que sí se está barajando es un encuentro el lunes o martes de la semana próxima, entre ambos ministerios de producción. De acuerdo a las existencias relevadas por el Instituto Nacional del Vino (INV) a agosto, y suponiendo que los despachos y exportaciones se mantengan como hasta ahora, están sobrando dos meses de despachos de vinos, equivalentes a casi 200 millones de litros.
Si no se los elimina antes de la cosecha, el precio de la uva va a ser muy bajo y los gobiernos tendrán a los viñateros protestando y reclamando ayudas. ‘’Aquí no tenemos excedentes, los excedentes sí son producidos por Mendoza pero como el mercado es único y no se puede compartimentar, el problema termina pegándonos. La alternativa que estamos barajando es la de dar algún tipo de ayuda a quien exporte para sacar vinos a granel. Y lo va a tener que hacer Mendoza más que nosotros.
Los excedentes grandes están en Mendoza, y deben hacerse cargo de los mayores costos que acarrearía sacar un vino del mercado interno’’, dijo Alós.
Mientras tanto, en Mendoza, aun no tomaron el guante que les endilgan desde San Juan: Ayer el ministro de Producción mendocino, Raúl Mercau; admitió una importante acumulación de stock que está presionando los precios a la baja, y dijo que ‘estamos justo en el momento de estudiar las alternativas para solucionar ésta problemática‘.
Agregó que ‘son dos las medidas que se están evaluando’: Por un lado, proponer una política de retención de stock y la otra pata de la medida, sacar stock hacia el exterior vía exportación de graneles de tintos y blancos. Asimismo, Mercau aseguró que ya se están analizando los fondos que se van a necesitar para hacerle frente a un operativo de ésta magnitud, aunque sin deslizar en ningún momento quien los aportará.
De todas maneras, el funcionario aseguró que ‘todo este esfuerzo que va hacer el gobierno para sostener los precios, va a ser a cambio de un compromiso del sector de reconversión y de cambios estructurales en sus producciones‘. Fuente: Corresponsal en Mendoza.

