El superávit de la balanza comercial registró en enero un derrumbe del 58% con relación a igual mes del año pasado, informó ayer Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). El comercio exterior argentino tuvo un saldo favorable de apenas 513 millones de dólares en los primeros treinta días del año.

Según el INDEC, durante el primer mes del año la Argentina exportó productos por 5.392 millones de dólares, con una suba del 22 %, e importó por 4.879 millones de la misma moneda, con un incremento del 52 %.

En términos de cantidades, las importaciones crecieron 40 %, ya que el precio de los bienes que se compraron afuera subieron apenas 9 %. En cambio, los envíos al exterior subieron un 11 % en cantidades y solo el 10 en valores.

El mayor incremento en las importaciones fue el de Combustibles y Lubricantes. En segundo lugar entre las compras se anotaron los Bienes de Capital.

Las Manufacturas de Origen Industria (MOI) y las de Origen Agropecuario (MOA) fueron los principales rubros de exportación al concentrar el 37% y 35% de las ventas al exterior.

Entre los productos que generaron un incremento en valor absoluto de las exportaciones se ubicaron, en primer lugar, Material de Transporte Terrestre, por las mayores ventas de vehículos para transporte de personas a Brasil y de mercancías hacia Alemania, Sudáfrica, Brasil y México. En segundo lugar, se destacaron las ventas de Grasas y aceites, por los envíos de aceite de soja hacia Egipto, Irán, India y Argelia, entre otros países.

Luego le siguieron las exportaciones de Residuos y desperdicios de la industria alimenticia, por las mayores ventas de harinas y pellets (pequeñas pociones) de soja hacia España, Irán y Tailandia, entre otras naciones.

En su reporte, el INDEC admite que la explosión importadora se produjo "en todos los usos económicos" aunque el 33 % de las compras fue de bienes intermedios para la industria y el 29 % bienes de capital, y sólo 12 en bienes de consumo.

Debido a este fuerte aumento de las importaciones, el Gobierno decidió a mediados de febrero, ampliar la cantidad de productos comprendidos bajo las Licencias No Automáticas (LNA), con el fin de impedir que estos bienes afecten la producción local.

En la víspera, la ministra de Industria, Débora Giorgi, defendió la aplicación de estas medidas de salvaguardas, que permitieron el crecimiento de la producción textil local, lo que demostró que +en esta Argentina no hay sectores (productivos) inviables". No obstante, el Gobierno ratificó ayer que estas LNA no se aplicarán a los socios del Mercosur.

Por su parte el intercambio comercial cerró el 2010 con un superávit de 12.057 millones de dólares, un 29 % por debajo de los 16.888 millones del 2009, un año signado por la crisis económica internacional.