El próximo jueves comenzarían a aplicarse nuevamente las cuestionadas subas tarifarias de luz y gas que habían sido suspendidas transitoriamente ante las quejas de miles de usuarios.

El 1ro de octubre vence la suspensión del cobro que dispuso el Gobierno, a menos que decida prorrogarse la vigencia de los subsidios estatales para el mercado eléctrico y gasífero.

Ante el malhumor social y el masivo reclamo que generó el último ajuste tarifario, el Gobierno resolvió el 12 de agosto pasado reintegrar por cuatro meses los subsidios al sistema energético -que habían sido eliminados- para poder desactivar los incrementos de luz y gas aplicados durante el invierno. Así dispuso mantener durante el bimestre junio y julio el 100 por ciento del subsidio estatal, mientras que para agosto y setiembre esa restitución alcanzó a 70 por ciento, lo que representó un costo fiscal de 493 millones de pesos. Sin embargo, hasta ahora el gobierno ratificó a los legisladores la vigencia del decreto 2067 que estableció la eliminación parcial de estos subsidios y la aplicación del denominado "Cargo Gas" destinado a solventar el costo del gas de importación como así también del denominado Programa para el Uso Racional de la Energía Eléctrica (PUREE) que castiga con mayor tarifa a aquellos consumos que superen los 1.000 kilowatts.

La jefa del bloque de diputados socialistas, Silvia Augsburger, se reunirá el miércoles próximo con otras bancadas de la oposición con el fin de impulsar la derogación del decreto. "El Poder Ejecutivo no tiene previsto retroceder con el aumento dispuesto a través del cargo impuesto en las boletas de gas", sostuvo la legisladora.

En San Juan, a través del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS), la medida anterior llegó a tener un doble impacto, ya que al aumento que se le cobra para financiar la importación del combustible desde Bolivia, se le sumó la anulación del subsidio. Sin embargo, al dar marcha atrás al tarifazo, los usuarios (alrededor de 4.100) con alto consumo, agrupados en las categorías R3 y R4, fueron beneficiados.

En cuanto a la tarifa eléctrica, la quita de subsidios impactará en los bolsillos de 20.000 clientes sanjuaninos que consumen más de 1.000 kWh por bimestre. El aumento anterior, significó para estos usuarios aumentos en sus facturas desde 113%. La quita de subsidios se siente en San Juan porque aumenta el costo del transporte de la energía que llega desde Mendoza.