Ayer por la mañana, en el auditorio del pabellón azul de la 124º Exposición Rural, el ingeniero en Minas y profesor de la Universidad Nacional de San Juan, Guillermo Preisz, disertó sobre "El aporte de la Minería al Agro". La sala contó con una decena de referentes del sector minero, el diputado Juan Carlos Gioja y productores agrícolas que se interesaron en la charla, pero fue escaso el público en general que participó.
"Decidimos hacer esta charla, como lo hicimos en Expoagro, de modos de ir testeando la recepción en el público", comentó la directora de Comercio Exterior de San Juan, Élida Hidalgo.
Por primera vez en los seis años en que la provincia participa en la mega feria, la minería intentó instalarse como tema de debate, en un contexto nacional controvertido que la actividad tiene actualmente. Así las cosas, la charla contó con medio centenar de participantes, de los cuales la mitad fueron concurrentes ligados al campo que utilizan a la producción minera en sus emprendimientos.
Debido a lo anterior, el paso a seguir el próximo año deberá perfilarse a la llegada a otros sectores que desconozcan o conozcan poco de los usos de la minería, el gran pendiente sanjuanino, que es el que genera las principales rispideces con los opositores a la misma.
Preisz trató la relación intrínseca entre las dos actividades, y se extendió hacia la producción minera local, histórica y actual, "es que la gente del agro son los principales mineros de la República porque cada gramo de minerales que es puesto al suelo proviene de la minería, como así también su reposición necesaria para los cultivos", expresó el especialista.
Otro punto importante de abordaje que tocó el ingeniero es la disposición de tierras fértiles que San Juan tendrá en 50 años, "los proyecciones del crecimiento poblacional, según la tasa actual, nos indican que serán 1.400.000 sanjuaninos aproximadamente en el 2060, por lo que si seguimos ensanchando la ciudad y ocupando las tierras fértiles estaremos en un problema", manifestó, e indicó como prioritario diseñar una política urbano-productiva, para que se descentralice la Capital, se promuevan actividades en otras jurisdicciones, y se continúe activamente con la minería, fuente de trabajo prioritario, según sus palabras.

