El factor climático, como la ola de calor del verano y los vientos, sumado al problema hídrico, fue decisivo para que la producción por hectárea (ha) de tomate para industria cayera esta temporada un 9%, al pasar de los 109.000 kilos por ha del 2021 a los 99.000 kilos de este año. La buena noticia es que creció un 11% la superficie cultivada, que en el 2022 fue récord hasta ahora, con 2.600 ha, frente a las 2.340 ha del año pasado, según datos de la Secretaría de Agricultura y Ganadería de la provincia.

Aun con la caída, San Juan lidera los rendimientos por ha del país, donde el promedio oscila en los 80.000 kilos por ha.

La razón de los buenos números en San Juan son una suma de factores. Entre ellos, el mayor uso de tecnología en este cultivo, porque por ejemplo casi el 95% de las plantaciones utilizan riego por goteo, se ha mejorado la cosecha, porque el 80% es mecánica y a que casi un 60% de la tarea de trasplante de los plantines también se hace en forma mecánica. "Hay que destacar que más del 90% de los productores de San Juan están asociados y por lo tanto asesorados por la Asociación Tomate 2000, lo que ayuda mucho a que el sector siga siendo productivamente competitivo, además de contar con el seguimiento de calidad", dijo Martín Gómez Sabatié, secretario de Agricultura y Ganadería local.

El funcionario dio a conocer que la temporada no arrancó bien porque los cultivos tempranos no tuvieron buenos rendimientos por el factor climático, fundamentalmente por la ola de calor y los vientos que afectaron la floración. Pero después el panorama mejoró con los cultivos tardíos.

Con el secretario coincidió un tradicional productor de tomate para industria, el pocitano José Luis Martín. "En general ha sido una buena temporada, pero no empezó bien, con rendimientos bajos, pero después mejoró con el tomate tardío", sostuvo.

Evolución

2.600  Es la cantidad de ha de tomate para industria cultivadas en San Juan. La cifra representa un crecimiento del 11% con respecto al 2021.

Pocito sigue siendo el departamento que concentra la mayor cantidad de cultivos de tomate para industria, con unas 1.150 ha, casi el 45% de lo que se cultivó en la provincia, que fueron 2.600 ha. El resto de los cultivos se concentran en Rawson, 25 de Mayo y San Martín, entre las principales zonas.

En el panorama nacional, San Juan, con las 2.600 ha, concentra un 33,5% de los cultivos del país, que este año sumaron 7.750 ha.

Otro dato es que de las 626.000 toneladas que se obtuvieron en el orden nacional, San Juan aportó el 42%, con 263.000 toneladas.

La demanda nacional para el 2022 se calcula en las 690.000 toneladas, es decir que todavía no se logra producir lo que consumen los argentinos. Es porción de la demanda insatisfecha se atiende con pulpa de tomate que se importa desde Chile.

El hecho de que más del 95% de los cultivos locales cuenten con riego por goteo, fue fundamental para que el tomate no fuera tan castigado por la crisis hídrica, que si afectó, por ejemplo, a los viñedos, una actividad en la que todavía no se avanzando tanto con la mejora del riego.

En cuanto a números, este año se pagó entre $11 a $11,60 por kilo de tomate, con picos de $12,60. En el 2021 se había pagado en promedio $8,50, según dieron a conocer fuentes del sector.

  • El panorama nacional

En lo que respecta al tomate industria, la producción nacional está muy por debajo de la demanda interna. Chile e Italia son quienes generalmente cubren la demanda, mostrando claramente las oportunidades de expansión para lograr el autoabastecimiento. En Argentina se consumen al año unos 650 millones de kilos de tomate para industria y, en una temporada normal, la cosecha local alcanza 450 millones de kilos.

Datos nacionales destacan información que tiene que ver con el consumo de tomate fresco. Según el detalle, la cifra ronda los 16 kilogramos por persona al año y, dentro del rubro hortícola, sólo es superado por la papa.

Otra provincia productora es Mendoza. Un informe elaborado por el Ministerio de Economía y Energía, a través del Instituto de Desarrollo Rural (IDR), estima que la superficie cultivada con tomate en la vecina provincia abarcó un total de 3.757 ha. Así, entre Mendoza y San Juan se produce el 80% del tomate para industria de Argentina. El resto de la superficie se encuentra distribuida entre Salta y Jujuy (región NOA), Corrientes y Formosa (NEA), Río Negro y Buenos Aires.

En Mendoza, el 92% de la superficie está implantada con tomate para industria y ocupa el tercer lugar de la superficie hortícola estival de toda la provincia, con el 20%, después de la papa (27%) y el zapallo (24%).