En las dos ferias -la de Capital y Rawson-, oscila entre los 8 y 10,50 pesos el kilo, ya sea en su versión perita o redondo; mientras que en las góndolas de las verdulerías de barrio y supermercados llega a costar hasta 14,90 pesos.
El motivo de la estrepitosa suba radica en un tema estacional, porque los tomates llegan en esta época del Norte argentino, principalmente de la provincia de Salta, donde han tenido jornadas con heladas que ‘quemaron las plantas’ y que al no disminuir la demanda se hicieron valer en cada uno de los destinos a los que fue, según dijo ayer el titular de la Sociedad de Chacareros Temporarios de Rawson, Juan Mingorance.
Desde la entidad aseguraron que en un mes el precio bajará, de acuerdo a que ya estaría el tomate local de invernadero, a la espera del tomate de campo que arranca a mediados del mes de noviembre.
“Es una época complicada para el tomate y para otras verduras, porque siempre sube y con el agregado que a todo los factores propios de la estación le tenemos que sumar el efecto inflacionario que tiene toda la verdura, donde si uno ve los insumos para mantener y producir tomate o cualquier cosa en el campo, aumentaron una barbaridad y resulta lógico que esté más caro.
El tema que ahora se juntó la estación con la inflación y por eso el tomate está más caro de lo normal’’, explicó Mingorance.
En un relevamiento que realizó ayer DIARIO DE CUYO, el precio promedio resultó ser bastante alto. “Está caro, es lógico en estos momentos y sabemos que de a poco irá bajando. Hoy lo tenemos en 10,50 pesos, tanto el perita como al platense’’, dijeron desde Mundo Frutal. “Ahora lo tenemos un poco más bajo pero recién bajará a precios más razonables a finales de octubre o noviembre, cuando entre el tomate sanjuanino’’, agregaron desde el local de Papas Becerra que se ubica en la Feria Municipal.

